Francisco Lindor se esmera en progresar como pelotero
En los campos primaverales, el pelotero boricua se contagia con la entrega de los demás compañeros día tras día.

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 9 años.
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El campocorto puertorriqueño Francisco Lindor no llegó a los campos primaverales de los Indios de Cleveland con un sentimiento de conformidad.
Todo lo contrario. El joven de 22 años terminó la pasada temporada en el segundo lugar de la votación para el Novato del Año de la Liga Americana, y es consciente de que debe trabajar con el doble de ahínco.
“Nunca he sido el tipo de persona que se conforma. Abrazo las cosas cuando las hago bien y cuando no las hago bien, porque entiendo que hay que balancear ambas cosas para seguir avanzando, mejorar, y mantener al hambre para ayudar al equipo”, dijo Lindor a la página oficial de los Indios en mlb.com.
En el 2015, el boricua bateó para .313 con 12 cuadrangulares y 51 carreras remolcadas en 99 partidos. Fue una magnífica temporada, pero el galardón del Novato de Año recayó en su compatriota Carlos Correa.
El propio Lindor confesó que la clave para su mejoría en la segunda mitad de la temporada fue hacer unos ajustes en la caja de bateo.
“Al principio conecté varios ‘hits’, pero por un tiempo fue una lucha. Los muchachos dudaron de mí, pero Terry Francona me dejó en la alineación bateando segundo y jugando el campocorto todos los días. Me ayudo a descubir que confío en mí y también en los Indios”, sostuvo.
En los campos primaverales, Lindor se contagia con la entrega de los demás compañeros día tras día.
“Me impresiona la ética de trabajo de los muchachos. Siempre pensé que trabajo duro, pero viendo trabajar a (Michael) Brantley, a (Jason) Kipnis, a (Yan) Gomes, a (Corey) Kubler y a (Carlos) Carrasco, me demuestra que si ellos lo hacen, será mejor que también lo haga”, dijo Lindor. “Lo están haciendo a nivel alto y son exitosos. Para ser exitoso como ellos y ayudar al equipo ganar, tengo que incorporar lo que hacen todos los días”, mencionó.
A pesar de que Lindor está a un paso de convertirse en el rostro de la franquicia por los próximos años, no se deja llevar por la fanfarria.
“No trato de ensombrecer a los demás. Es mi manera de ser. No se trata de estar el frente para llevarlos al éxito. No deseo eso. Quiero cruzar la meta a la misma vez que los demás”, concluyó.