Francisco Lindor más que contento con su nuevo contrato: “¡Lo logramos Puerto Rico!”
El campocorto puertorriqueño dio sus primeras expresiones el jueves tras el pacto de $341 millones por 10 años con la novena de los Mets.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 3 años.
PUBLICIDAD
Francisco Lindor quería gritar de felicidad con todas sus fuerzas luego de acordar una extensión de contrato histórica de $341 millones por 10 años con los Mets de Nueva York, pero aguantó las ganas debido a que se encontraba en un cuarto de hotel.
Incluso, su padre, Miguel Lindor, le dijo el miércoles que no hiciera mucho ruido en la habitación y el campocorto puertorriqueño dio una contestación válida para no hacerle caso.
“Lo llamé y estaba feliz y emocionado. Yo quería gritar y me dijo que no lo hiciera. Le dije, ´papi, ¿de qué hablas? Cuando tu guías por la autopista y ves en el camino un billboard del Powerball con la cantidad de $341 millones, que te acabas de pegar, ¿qué vas a hacer? Es por lo que he trabajado toda mi vida”, compartió este jueves Lindor en conferencia de prensa.
La nueva estrella de la Gran Manzana, de 27 años, se siente así: como si se hubiera pegado en la lotería y no ocultó su famosa sonrisa en su primer encuentro con los medios estadounidenses para hablar de los pormenores del tercer pacto más lucrativo en la historia de las Mayores, detrás del guardabosques de los Angels, Mike Trout ($426.5 millones), y del jardinero de los Dodgers, Mookie Betts ($365).
Además, se convirtió en el mejor puertorriqueño pagado en la historia de las Mayores, detrás del pacto de $119 millones del manatieño Carlos Beltrán con los propios Mets en 2005. También, es el torpedero con el contrato más lucrativo.
🚨 Live 🚨
— New York Mets (@Mets) April 1, 2021
Watch @Lindor12BC address the media. #LGM https://t.co/fyI5Bjt3PW
Lindor estrechó la mano con los Mets en la víspera del inicio de temporada de las Grandes Ligas el jueves. Nueva York, sin embargo, no pudo salir al terreno para enfrentar a Washington debido varios casos positivos a COVID-19 en la novena de los Nationals.
Aunque tiene que esperar para debutar en la temporada regular, Lindor está más que feliz que las negociaciones acabaron a favor de ambas partes.
“Primero, quiero darle las gracias a Dios por mantenerme saludable, de rodearme de grandes personas todos los días, por poner personas correctas en mi camino. Gracias a Steve (Cohen, dueño de los Mets) y su familia por creer en mí. Vamos a representar esta organización de la manera correcta. Estoy honrado y humilde por la oportunidad de estar en esta organización por los próximos 11 años. Estoy emocionado y motivado. Estoy honrando de vestir azul y anaranjado. No puedo esperar en continuar esta relación con la organización. A los fanáticos: Aquí vamos, baby”, expresó Lindor, en sus primeras palabras tras el acuerdo.
Lindor también agradeció a sus padres, a sus hermanas y a su prometida, Katia Reguero, con quien procreó su hija que nació el pasado diciembre. De igual forma, dio las gracias a la organización de Cleveland por los primeros seis años de su carrera, ganando dos Guantes de Oro, dos Bates de Plata y cuatro apariciones en el Juego de Estrellas.
El cagüeño fue cambiado a principios de año a los Mets junto al abridor venezolano Carlos Carrasco. Para evitar una vista de arbitraje, última antes de optar por la agencia libre, Lindor acordó una cifra de $22.3 millones en 2021, total que se une a los $341 millones.
En las últimas semanas, su agente David Meter negoció cifras para la permanencia de Lindor en Nueva York. Reportes indicaron que los Mets ofrecieron primero $325 por 10 años y Meter respondió con una contraoferta de $385 por 12 años. En los pasados días, Lindor tuvo una cena en Nueva York con Cohen para poner los puntos sobre la mesa.
“Mi agente David hizo un gran trabajo en este periodo. No solo en estos años, sino en los ocho que ha estado negociando por mí. Estoy orgulloso por el trabajo que ha hecho. La cena (con Steve) ayudó bastante. Cada uno expresó su sentir de dónde estábamos. Nunca tiré una línea en la arena. Sí tiramos números, pero vernos nos dio un sentido de dónde estaba él y yo. Para él, es ganar. Ganamos ambos con esto. Fue una reunió amigable”, compartió.
“Soy reservado sobre los números. Todo esto lo mantuvimos bien cerrado. Estaba confiado en tener el acuerdo. Sabía que algo iba a pasar. Era cuestión de esperar el momento correcto para que mi familia se sintiera cómoda. De mi parte, nunca van a escuchar los detalles. Así no trabajo. Espero que me entiendan por no entrar en detalles”, agregó sobre las negociaciones.
Lindor mencionó a Reguero y sus hermanas, encabezadas por la mayor Legna, como las personas más cercanas durante el proceso de negociación.
“Estuvieron ahí más. Me dijeron que iban a estar orgullosas de la decisión que tomara. Que Dios tiene un plan. Eso me dio paz. Sabía que cualquier decisión que tomase, si aceptaba o esperaba a la agencia libre, ellas iban a estar conmigo”
Durante la pretemporada, Lindor estuvo encendido con el madero. A la misma vez, se familiarizó con la cultura de los Mets, amoldándose con éxito al clubhouse y creando, de inmediato, lazos con sus nuevos compañeros. Por estas razones, decidió quedarse con la franquicia por la próxima década.
“El grupo de muchachos y muchachas en el clubhouse está comprometido en ganar. Tienen hambre, quieren mejorar. Eso para mí dice mucho. Estamos en una posición de mejorar. Tenemos un buen equipo. Eso para mí es lo que veo en una franquicia: que quiere ganar, y mejorar, además de tener un personal de clase alta, comenzando desde el tope. Estoy feliz y me siento cómodo. Me gusta la oportunidad de traer un campeonato a la ciudad. Lo mejor de todo es que todos lo quieren lograr. ¿Por qué los Mets? ¿Por qué no?”, sostuvo.
Con la llegada de Cohen como propietario, los Mets quieren ganar la Serie Mundial lo más pronto posible, algo que no hacen desde 1986. La última aparición en el Clásico de Otoño fue en 2015, edición ganada por los Royals de Kansas City.
La inyección de Lindor, junto a estrellas como la primera base Pete Alonzo y los brazos de Jacob DeGrom, Marcus Stroman y Noah Syndergaard (recuperándose de una cirugía de Tommy John) y Carrasco, son la apuesta para acabar la sequía en un mercado exigente como el de Nueva York. Lindor viene de una temporada acortada de .258 de promedio de bateo con ocho jonrones 27 carreras impulsadas. En su carrera, promedia .285 con 896 hits, 138 cuadrangulares y 411 carreras remolcadas.
¿Alguna presión?
“La presión se la añade un mismo. Si doy lo mejor, esa es la presión que debo tener, de dar lo mejor que pueda. Será una corrida especial. Mi meta es que esta organización se convierta en una de las mejores y que todos quieran venir a jugar acá. Estoy orgullos de mi juego y de este logo (se toca el pecho). Tengo que ir todos los días a defenderlo. La cifra que tengo al lado es lo que significa. Son 341 millones de razones para ir a darlo todo todos los días. No importa si gano cero o $341 millones, tengo que jugar el juego de la manera correcta, sin importar donde estés, aunque no te paguen. Tengo que respetar a mis compañeros, el equipo y el juego. Iba a hacerlo de esta manera si no firmaba. Así lo haré todos los años”, contestó.
A su isla de Puerto Rico, Lindor tuvo un mensaje al convertirse en boricua mejor pagado en las Mayores.
“Es un honor. ¡Lo logramos Puerto Rico! Estamos en lo más alto, estamos de celebración. Esto es solo un granito de arroz que estoy tirando al mundo. De que sí se puede. Un niño pequeño de Puerto Rico, que no era el mejor en la escuela, que no era el mejor expresándose con el lenguaje, que vino a Estados Unidos y vivió en un hotel con su padre y hermanos con un microondas. Mira dónde estoy ahora. Puertorriqueño donde quiera que voy. Si voy a la luna, también lo grito ahí”, dijo con emoción.