Lo que siempre buscó sin miedo. Y ahora Rey Félix puede presumir del logro supremo.

Félix Hernández finalmente alcanzó la perfección que persiguió desde que debutó a los 19 años, con su cara de niño, cabello rizado y gorro que nunca podía acomodarse bien.

El as venezolano ya no tendrá que pasar noches pensando si este sería el momento en el que lograría la joya principal.

"Siempre lo tenía en mente, en cada juego. 'Tengo que lanzar un juego perfecto'. Es algo que cada pitcher aspira", dijo Hernández. "Hoy ocurrió y es algo especial. No tengo palabras para explicarlo. Esto es muy grande. No pasa todos los días".

Hernández lanzó el primer juego perfecto de los Marineros de Seattle y el número 23 en la historia del béisbol de Grandes Ligas, al maniatar el miércoles a los Rays de Tampa Bay con una magistral joya de pitcheo para la victoria 1-0.

El Cy Young de 2010 nunca había ocultado su ambición de lanzar un juego perfecto. En una tarde soleada en casa, finalmente lo consiguió contra los Rays.

Para un franquicia rumbo a su décima primera campaña seguida sin clasificarse a los playoffs, Hernández es el motivo solitario para que los fanáticos de los Marineros no pierdan el interés.

Hernández es idolatrado en esta parte del país, enclavada en el Noroeste del Pacífico. No sólo por sus actuaciones brillantes, sino por su lealtad a la ciudad de Seattle.

Cuando pudo haber esperado y firmado un mega contrato para irse a otro sitio, Hernández renovó su contrato en 2010 y así quedar atado con el club hasta la campaña de 2014.

Y así fue, que cuando esos fanáticos con camisetas amarillas en una sección del Safeco Field que se conoce como la "Zona del Rey" empezaron a corear su nombre al inicio del octavo inning, todo el estadio se puso en sintonía en un momento apoteósico.

Los gritos y vítores alcanzaron su pináculo a las 3.02 de la tarde, hora de Seattle, cuando Hernández tiró un tercer strike cantado para ponchar a Sean Rodríguez y dar rienda suelta al festejo.

Metido en un elevador repleto de gente tras el juego, el gerente de los Marineros Jack Zduriencik bromeó al ponerse el teléfono celular al oído, diciendo: "No vamos a canjear a Félix".

El de Hernández fue el tercer juego en las mayores esta campaña, uniéndose a Philip Humber de los Medias Blancas de Chicago en abril y Matt Cain de San Francisco en junio. El perfecto de Humber fue ante los mismos Marineros, mientras que Cain lo hizo frente a los Astros.

Además, el venezolano Johan Santana lanzó un juego sin hits para los Mets de Nueva York ante los Cardenales de San Luis en junio.

"Tanto tiempo que busqué conseguir uno (juego perfecto). El de hoy es para ustedes", dijo Hernández al público al hablar desde el terreno después del último out.

Desmond Jennings bateó como emergente por el receptor venezolano José Lobatón para iniciar la novena entrada. Hernández lo puso en cuenta de 1-2 antes que Jennings pegara dos batazos de foul consecutivos y Hernández lo ponchara abanicando con una recta de 92 mph en la zona de strike. Jeff Keppinger llegó a la caja de bateo en lugar de Elliot Johnson y pegó una roleta de out al campocorto en cuenta de 1-2.

Con un out del final, Rodríguez enfrentó a Hernández y se montó con cuenta de 2-0. Hernández respondió con dos strikes con lanzamientos rompientes y coronó la perfección con un tercer strike cantado.

Hernández alzó sus brazos al cielo y sus compañeros se abalanzaron a él en el montículo. El venezolano abrazó al receptor John Jaso por un par de segundos y luego compartió abrazos con el resto de sus compañeros de equipo.

Más de la mitad de todos los juegos perfectos —12— se han dado en las últimas 25 campañas.

Este fue el sexto juego sin hits en las mayores este año, tres de ellos en Safeco Field. Luego de la joya de Humber, seis lanzadores de los Marineros se combinaron para dejar sin imparables a los Dodgers de Los Angeles el 8 de junio. Sólo dos veces se han tenido siete juegos sin hits en una temporada desde 1900. La primera vez fue en 1990 y luego en 1991, con Nolan Ryan tirando dos en esos años.

Para los Rays, esto es algo habitual. Fue la tercera vez en cuatro campañas que son las víctimas de un juego perfecto, por Dallas Braden en 2010 y Mark Buehrle en 2009.

"Si hay algo que he aprendido de los juegos sin hits y los perfectos es que no tienen ningún significado al día siguiente", dijo el piloto de los Rays Joe Maddon.

El dominio de Hernández fue de menos a más en el partido. Se paseó en los primeros cinco innings, supo sacar outs en turnos complicados y tácticas dilatorias de los Rays. No se arredró ante la presión propia al acercarse al out 27. Ocho de sus 12 ponches fueron en los últimos cuatro innings, sacando por la vía de los strikes a los tres bateadores en el sexto y luego en el octavo. Lanzó un pitcheo de 95 mph en el noveno.

Hace dos aperturas contra los Yanquis de Nueva York, Hernández lanzó una blanqueada de dos hits y el manager de los Marineros Eric Wedge le consideró como la mejor salida de Hernández. Está clara que la de este miércoles fue mucho mejor.

"Fue especial lo de hoy. Estaba en otro nivel", dijo Wedge. "Pero Félix es tan consistentemente bueno que cuando supera sus límites, lo cual hemos visto este año, uno nunca sabe lo que puede pasar".

El derecho de 26 años enloqueció a los Rays con su curva durante la tarde. Evan Longoria, Ben Zobrist y Carlos Peña se poncharon en el octavo, abanicando lanzamientos rompientes.

"Con cualquier lineup, el resultado hubiese sido el mismo", dijo Jaso.

En el resto de la jornada, por la Liga Americana, Tigres derrotaron 5-1 a Mellizos, Orioles 5-3 a Medias Rojas, Yanquis 3-2 a Rangers, Medias Blancas 9-5 a Azulejos y Reales 3-2 a Atléticos.

Por la Nacional, Filis vencieron 9-2 a Marlins, Cachorros 7-2 a Astros, Rockies 7-6 a Cerveceros, Nacionales 6-4 a Gigantes, Dodgers 9-3 a Piratas, Rojos 6-1 a Mets, Bravos 6-1 a Padres y Cardenales 5-2 a Diamondbacks.

Los Angelinos de Los Angeles se enfrentan a Indios de Cleveland.