Miami. La novena de Estados Unidos está de regreso en la final del Clásico Mundial a vencer este domingo 14-2 a Cuba con un ataque de cuatro cuadrangulares en un partido en que otro jugador estrella salió de juego y en que la fanaticada cubana se manifestó politicamente.

Estados Unidos se enfrentará el miercoles en la final al ganador de la segunda semifinal de este lunes entre México y Japón. La novena estadounidense va en busca de su segundo campeonato corrido en el Clásico.

Trea Turner dio dos jonrones e impulsó cinco carreras en el partido. Ha dado tres jonrones en los últimos dos partidos, incluyendo uno el sábado de cuatro carreras y decisivo ante Venezuela en los cuartos de final. Lidera el Clásico con 10 carreras impulsadas.

El estrella de Estados Unidos, Nolan Arenado salió del encuentro luego de recibir un bolazo en la mano derecha. Se informó durante el juego que resultó negativa una prueba que Rayos X que le hicieron en el estadio. El Clásico ya ha sufrido las bajas del venezolano José Altuve (Astros) y el boricua Edwin ‘Sugar’ Díaz (Mets) .

Ante 35,779, el partido de Cuba y Estados Unidos fue celebrado con manifestaciones políticas en las gradas y en el terreno por la fanaticada cubana. Fanáticos también lanzaron objetos al bullpen de Cuba. Fuera del parque también hubo manifestaciones.

Cuba tuvo una gran oportunidad en la primera entrada y, aunque anotó una carrera, no la aprovechó del todo.

Llenó las bases sin sacar la bola de cuadro y anotó igualmente por una base al cuarto bate Alfredo Despaigne por el abridor Adam Wainwright, quien eliminó los siguientes tres bateadores para cerrar la entrada prácticamente ileso.

Estados Unidos ripostó inmediatamente con doble de Mookie Betts y jonrón por Paul Goldschmidt para para tomar la ventaja de 2-1 ante el zurdo abridor Renis Elías.

Un entrada luego, Trea Turner la desapareció sin dudas por el jardín izquierdo para despegar 3-1 a Estados Unidos ante Elías.

Estados Unidos despegó 5-1 en la tercera entrada ante el relevo de Cuba compuesto pot Miguel Romero y Carlos Viera. Sencillo al central impulsador de Will Smith y bombo de sacrificio de Pete Alonso ampliaron la ventaja de Estados Unidos.

Wainwright, por su parte, eliminó a ocho de los próximos nueve bateadores luego de la primera entrada turbulenta que tuvo y colgó tres ceros corridos mientras su ofensiva iba despegando lenta pero seguramente en el marcador.

Cuba no había dado cinco imparables en las primeras cuatro entradas, pero no había podido dar sencillos corridos hasta la quinta, cuando descontó una carrera.

Dos senciillos corridos de Erisbel Arruebarrera y Andy Ibañez marcó la segunda carrera para Cuba con la anotació Yoan Moncada, quien abrió la entrada con doble al derecho ante el relevista Miles Mikolas.

Estados Unidos mantuvo su ataque moderado pero consistente sobre el pitcheo de Cuba y alargó una racha de carreras anotadas por entradas desde el primer episodio hasta el séptimo en este partido en que no aplicó la regla de nocaut.

Terminó anotando carreras en ocho de las nueve entradas.