¡Dramático final! Criollos conectan dos cuadrangulares en la novena y vencen a Gigantes
Dwight Smith Jr. y Jonathan Morales pegan dos jonrones y ganan el quinto juego de la serie final de la pelota invernal.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 6 meses.
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Carolina. Cuando todo indicaba que los Gigantes de Carolina iban a ganar vía blanqueada, Dwight Smith Jr. y Jonathan Morales conectaron dos cuadrangulares consecutivos, en la novena entrada, para impulsar a los Criollos de Caguas a una dramática victoria por 3-2 en el quinto juego de la serie final del béisbol invernal.
De esta manera, la “Yegüita” retomó la ventaja del baile de coronación de la Liga de Béisbol Profesional Roberto Clemente (LBPRC) al irse arriba, 3-2.
Con la lluvia cayendo en el Estadio Roberto Clemente Walker, Pedro León llegó a primera base por un demoledor error de Delvin Pérez en el campo corto. Acto seguido, Smith Jr. desapareció el primer lanzamiento del estadounidense Connor Zadzeck con un jonrón de dos carreras, que despertó a la afición cagüeña que había invadido el parque. En el siguiente turno, los Criollos volvieron a castigar a Zadzeck con un vuelacerca solitario de Morales.
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— Criollos de Caguas 2️⃣0️⃣🏆 (@CriollosCaguas) January 18, 2024
En una sorpresiva movida de Yadier Molina, mánager de la novena cagüeña, Smith Jr. entró al partido como bateador emergente en sustitución del Grandes Ligas Emmanuel Rivera. De más está decir que el estadounidense no defraudó a Molina.
“Honestamente, estábamos tratando de empezar algo porque era un juego cerrado. Estaba, 1-0, desde la primera entrada. Ellos estaban lanzando buenos pitcheos y nosotros simplemente no podíamos conectar. En estos partidos, solo necesitas una entrada para ganar”, dijo Smith Jr. a Primera Hora después del encuentro.
“Yo creo que Yadi tiene confianza en todos los integrantes del equipo. No solamente en mí. Nosotros hemos tenido distintas alineaciones esta temporada y, por eso, creo que cualquiera puede tener una gran noche sin importar que esté en la alineación o en el banco... Este definitivamente es de los mejores momentos en mi carrera. Al menos en el plato, es el mejor. Un batazo como ese, en una final, es algo que tú sueñas en tu patio cuando pequeño”, comentó.
Los cuadrangulares de Smith y Morales fueron apenas el quinto y sexto hit de unos Criollos que habían sido dominados por los lanzadores de los Gigantes hasta ese entonces.
El sexto juego de la serie final está programado para este viernes, en el Estadio Yldefonso Solá Morales, de Caguas.
Los Gigantes arrancaron el partido con el pie derecho al anotar en apenas la primera entrada. Con corredores en las esquinas, el cubano Adeiny Hechavarría bateó una roleta para out forzado, que trajo al plato a Bryan Torres.
Al comienzo del juego, el abridor de Carolina, David Richardson, controló la ofensiva de los Criollos al solo permitir un hit en tres capítulos lanzados. La “Yegüita” volvió a conectar un imparable para la parte alta de la cuarta entrada, cuando Danny Ortiz pegó un sencillo al bosque derecho. Sin embargo, ese fue único inatrapable de Caguas durante ese episodio.
Richardson bajó del montículo, después de 3.1 entradas en los que abanicó a tres bateadores, recibió dos hits y no permitió carreras. El estadounidense fue sustituido por el derecho Eddy Reynoso.
En la baja de la sexta, los locales tuvieron la oportunidad de extender su ventaja con corredores en segunda y tercera base sin outs. Sin embargo, la defensa de los Criollos previno que los Gigantes rayaran de nuevo la pizarra con tres elevados consecutivos.
Uno de ellos fue de Hechavarría, quien mientras corría a la primera almohadilla sufrió una lastimadura en la pierna. Por esta razón, el cubano fue sustituido, en la alta de la séptima, por Aldemar Burgos, quien entró como jardinero. Delvin Pérez pasó a encargarse del campocorto y Torres se movió a la segunda base.
El dirigente de los Gigantes, Edwards Guzmán, confirmó a Primera Hora que Hechavarría sufrió un calambre en el tendón de la corva izquierdo y está en duda para el sexto juego este viernes.
El combinado local dio señales de vida, en la baja de la novena, con un sencillo remolcador de Félix Stevens. Pero, el taponero Ricardo Gómez consiguió el salvado al ponchar a Pérez.