Aviso importante: la negociación de Carlos Correa y los Mets de Nueva York no es oficial, al momento todo es especulativo.

Eso nos ha enseñado esta agencia libre con el solicitado boricua.

Pero de concretarse, el boricua Carlos Correa se pudo haber echado en contra a otra organización: la de los Giants de San Francisco, que se une a la de los Yankees de Nueva York, a la de los Dodgers de Los Ángeles, entre otras que abuchean al santaisabelino, que no rehúye combates, sin embargo.

Y, al mismo tiempo, se ganó a una organización como la de los Mets que está llena de sangre boricua, desde los jugadores, a los coaches a la gerencia, porque son boricuas hasta la esposa y suegro del dueño.

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El cambio de dirección en la agencia libre de Correa, que trascendió en esta madrugada, iniciado por una discrepancia que tuvo San Francisco con la condición física del Correa (propenso a lesiones hasta el 2020), ha dejado boquiabuerto al mundo de Major League Baseball (MLB), huerfanos a los Gigantes de otro valioso agente libre y llenó a los Mets de no solamente compromisos económicos, sino de otro boricua en nómina.

La duda de los Giants en torno a Correa no solamente canceló la histórica negociación de 13 temporadas y $350 millones con Correa, sino que llevó al boricua a mirar hacía los Mets, que evidentemente no desconfiaron en el boricua al ofrecerle un contrato de 12 temporadas y $315 millones.

El tiempo dirá quién se equivocó, si los Giants por ser tan precavidos o si los Mets por ser tan arriesgados.

Correa, cuyo agente es el voraz Scott Boras, no tardó en presentar una nueva novia como los Mets luego de rompiera el ‘sí' en el altar entre él y los Giants. La pronta aparición de los Mets es evidencia que las partes tuvieron negociaciones previas a San Francisco, como lo tuvo Correa con los Cubs de Chicago y los Twins de Minnesota.

El campo corto pasó de unos Giants que no estarán listos para ser contendores en el 2023, a unos Mets que están gastando para ganar, luego de invertir para quedarse cortos en la Serie del Campeonato de la Liga Nacional en 2022. Correa, que fue campeón con los Astros en 2017 y que puso en contensión a Minnesota en parte del 2022 con su liderato, es una pieza que puede cuadrar a los Mets porque si no batea, fildea o saca la cara cuando hay problemas.

Beltrán jugó cinco temporadas con los Mets de Nueva York, entre el 2005 y el 2011. En el equipo, coincidió con Carlos Delgado para formar una temible dupla en la alineación.
Carlos Beltrán y Carlos Delgado lideraron una era en los Mets. (The Associated Press)

El santaisabelino pasa también a unos Mets llenos de boricuas estelares junto al cagueño campo corto Francisco Lindor, al taponero naguabeño Edwin ‘Sugar’ Díaz, al receptor en ascenso Tomás Nido y al coach cagüeño de tercera base, Joey Cora.

No se puede olvidar que la esposa del dueño es la cagüeña Alexandra García, cuyo padre es boricua y fanático número 1 de los Mets desde hace décadas como residente en la ciudad de Nueva York.

Correa hace recordar, por tanto, a aquellos ‘BoriMets’ que lideraban Carlos Delgado y Carlos Beltrán en la década del 2010 y en el que también figuraban el fenecido zurdo Pedro Feliciano, el versátil Tony Valentín, los receptores Ramón Castro y Santos Alomar, hijo; así como Luis Collazo, Rubén Gotay, Ricky Ledee.