El cariño entre Carlos Correa y la ciudad de Houston en mutuo.

El pelotero puertorriqueño que regresó al Minute Maid Park por primera vez que decidió firmar con los Twins de Minnesota como agente libre, recibió una calurosa bienvenida la noche del martes cuando se dirigió a la caja de bateo para consumir un turno en el partido contra los Astros.

Cuando Correa fue presentado, caminó hacia la caja de bateo al son de una canción del artista de música urbana Bad Bunny. Enseguida fue aplaudido y levantó el casco en una señal de saludo hacia los espectadores. En dicho turno, Correa se poncho.

El boricua también recibió la sortija por haber representando la Liga Americana en la pasada Serie Mundial contra los Braves de Atlanta. El manager de los Astros, Dusty Baker, estuvo a cargo de la entrega.