La gerencia de los Red Sox de Boston frenaron indefinidamente el proceso de rehabilitación del puertorriqueño Enrique “Kiké” Hernández.

El versátil pelotero ha estado fuera de acción desde el 8 de junio debido a un esguince de un músculo de la cadera. Hernández participó en un partido en Worcester a nivel Triple A el pasado viernes, pero sintió incomodidades en la cadera después. Eso obligó a la gerencia de los Red Sox a detener las actividades de Hernández para una evaluación.

“Es terrible por sentimos que a esta punto estaba progresando”, dijo Alex Cora, mánager de los Red Sox. “Obviamente, por eso le permitimos jugar. Ahora, tendremos que ser pacientes”.

El plan es que le hagan unas pruebas adicionales a Hernández durante la semana.

“No se siente bien, por lo que tendremos que dar marcha atrás y determinar si hay otra cosa sucediendo. Conoceremos más durante la semana”, agregó Cora.