Alexis Díaz ha puesto su firma en 46 de las 76 victorias de los Reds de Cincinnati, ya sea con uno de sus 36 salvamentos y con cada una de sus nueve victorias. ¿MVP del equipo?

Cincinnati, por cierto, está en la pelea por la postemporada y Díaz está tercero en salvamentos en todas las Grandes Ligas, además de que fue Todos Estrellas. Él y el bayamonés Fernando Cruz, además, han sido parte de las 21 entradas corridas en cero que ha dado el bullpen de los Reds.

Si le dan a escoger al exrelevista boricua Iche Santiago sobre quien es el MVP de los Reds, de seguro escogería al derecho de Naguabo, quien además posee efectividad de 2.26 en la temporada tras 65 apariciones y 62.1 entradas.

Pero esa no es la pregunta que le toca a Santiago contestar; eso le toca al equipo. De lo que Santiago sí puede hablar es qué cambios ha dado Díaz para convertirse este año en uno de los líderes relevistas de las Grandes Ligas. Santiago es quien trabaja con Díaz en Puerto Rico durante las temporadas libres.

La contestación que tiene incluye elementos técnicos e intangibles, comenzado con los técnicos, específicamente con la mejoría del boricua tirando strikes o simulando éstos.

“Lo que cambió fue el control. En las ligas menores era más descontrolado. Repetimos mucho la mecánica y el punto de soltar la bola. Cuando repites eso, los lanzamientos van a ser mejores, más consistente en la zona de strikes. Eso es lo que está pasando con él, que está tirado más strikes. Y cuando se da el lujo de tirar el slider de bola, los tipos le hacen swing porque slider parece un strike. Eso es lo que uno quiere: que todos los lanzamientos parezcan strikes. Ese ha sido el gran cambio de él”, señalo Santiago.

Santiago agregó que haber lanzado en el 2020-21 y 2021-22 en Puerto Rico le ayudó a Díaz a trabajar en la mecánica y en la experiencia antes de ascender a las Grandes Ligas en el 2022.

Díaz salvó el miércoles la victoria de los Reds con una ejecutoria reflejada en la explicación de Santiago. El miércoles, ante los Tigres de Detroit, Díaz dio dos outs en la novena antes de dar bolazo y permitir que ese corredor le llegara a segunda. Aunque cayó en conteo de 2-1 ante el cuarto bateador en la entrada de Detroit, lanzó un slider que invitó al bateador a hacerle swing, solo para dar una débil línea por primera base que salió del bate a la velocidad de 75.2 millas por hora.

Su novena victoria también es un reflejo de lo que señala Santiago. Esa vez, Díaz se montó en conteo de 1-2 y lanzó un slider que el bateador conectó sólido varias pulgadas más abajo de la zona de strike para un out por tercera que cerró la entrada en la eventual victoria de los Reds.

Díaz ha dado tres bases por bolas menos (33) en el 2023 en comparación con la pasada temporada, pero aún es un trabajo en construcción, advirtió Santiago.

“Hay espacio para seguir mejorando el control y la velocidad. Él todavía no ha madurado. No está en la cima todavía”, dijo Santiago sobre el relevista de 26 años y dos temporadas de experiencia en las Grandes Ligas.

El intangible que ha ayudado a Alexis es trabajar en la temporada libre al lado de su hermano Edwin Díaz, quien también utiliza el recurso de Santiago cuando está en Puerto Rico, al igual que el relevista boricua de los Braves de Atlanta, Joe Jiménez.

De hecho, la mecánica de los Díaz es casi idéntica, producto del ejemplo, no de hacer que Alexis adopte la mecánica de Edwin para ser efectivo, dijo Santiago.

“Antes, cuando joven, a Alexis había que empujarlo un poco para trabajar. Es parte de la inmadurez. Ahora él entiende y ha visto lo que ha hecho el hermano y se refleja mucho en el hermano. Eso lo veo. Siempre están compitiendo cuando están tirando bullpen, a ver quién tira más strikes. Eso es bueno, es sano porque te ayuda a querer ser mejor que tu hermano, pero es compitiendo. A la verdad que mejor ejemplo que el que tiene Alexis, no lo puede haber”, dijo Santiago.

Edwin es dos años mayor que Alexis.