Christian Vázquez: “Se siente rico ser campeón”
El otro boricua de los Medias Rojas, Christian Vázquez, se gozó con su familia el desfile de campeones.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 6 años.
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Cuando los Medias Rojas de Boston regresaron de Los Ángeles con el trofeo de campeón de la Serie Mundial, Christian Vázquez entró al Fenway Park cargando ese significativo botín.
Y es que, en sus propias palabras, “se siente rico ser campeón”.
El receptor bayamonés vivió ayer un desfile de emociones mientras sus compañeros de equipo, miembros de la organización y más importante aún, su familia, desfilaron por las calles de la ciudad de Boston ante cientos de miles de personas en la celebración oficial de los nuevos campeones de las Grandes Ligas.
“Fue algo muy especial. Después de todo el trabajo que se hizo todo el año, ver que la gente te brinda todo el amor y todo el apoyo que nos brindaron hoy es algo súper especial. De verdad que se siente rico ser campeón”, dijo Vázquez a Primera Hora luego del desfile.
El evento estelar arrancó pasadas las 11:00 a.m. y salió desde el Fenway Park. Luego de recorrer algunas de las principales vías de la ciudad entre lluvias de confetti y hasta de latas de cerveza, alrededor de dos horas más tarde llegó a su fin en una zona cercana al centro de gobierno.
Aunque la celebración se realizó bajo estrictas medidas de seguridad, hubo incidentes en los que algunos de los presentes lanzaron latas de cerveza llenas a sus ídolos. Algunas de las víctimas fueron el dirigente Alex Cora y hasta el mismo trofeo de campeonato, que fue levemente dañado.
En el caso de Cora, aunque este no resultó herido por la lata que le pegó, la que también cayó sobre su hija Camila, una persona fue arrestada y acusada de agresión y llevada ante un juez.
Vázquez dijo que tuvo que esquivar varias latas, pero estaba disfrutándose el espectáculo acompañado por su padre, su madre, sus hermanas y su prometida, con quien se casará este mes.
Destacó una emoción especial al ver a su padre, Rafael, quien le regaló su primera trocha de catcher cuando tenía 7 años, disfrutando las muestras de afecto dirigidas hacia su hijo y sus compañeros.
“Él estaba bien emocionado ondeando la bandera de campeones. Se sintió increíble ver a mi papá observar todo ese cariño que nos dio la gente. Es difícil explicar la sensación”, manifestó el receptor, de 28 años, quien espera vivir otras emociones este sábado cuando junto a un buen grupo de sus compañeros viajen a celebrar la conquista en Caguas.
Vázquez conectó ocho hits en 37 turnos (.217) durante la postemporada para los Medias Rojas, incluyendo un jonrón y un doblete.
Durante la Serie Mundial sus tres hits fueron importantes y hasta oportunos para Boston.
“Me sentía bien enfocado porque tenía que estarlo. El equipo dependía de mí y de los que estábamos en la parte de abajo del lineup, porque si nos embasábamos entonces venían Mookie (Betts), (Andrew) Benintendi y (Steve) Pearce, los caballos del tope de la alineación a traernos. Así anotamos muchas carreras con dos outs”, explicó el bayamonés.
De hecho, la química del equipo este año y los anuncios de que Chris Sale y David Price regresan con el equipo ya tiene a Vázquez pensando en otro cetro.
“Ya tengo la sortija que quería, pero esto de ser campeón me gustó y quiero otra”, indicó. “El equipo que tenemos es súper joven y con hambre de seguir ganando. Esperamos que también regresen (Nathan) Eovaldi y Pearce para volver a ganar 108 o 109 juegos más”.
Aunque temprano en su carrera ya tiene el anillo de campeón que no muchos consiguen, eso es un logro colectivos. A nivel personal, el próximo objetivo –aparte de esa segunda sortija– tiene otro en mente: convertirse en un Guante de Oro.
El 2018 de Vázquez no estuvo exento de frustraciones, pues perdió tiempo de juego debido a una fractura en un dedo y la subsiguiente operación. Pero también tuvo satisfacciones, como ver a su compatriota Alex Cora reescribir la historia de los Medias Rojas y del béisbol boricua.