San Antonio no sale de la macacoa
Spurs sufren la 16ta derrota seguida pesar de un doble-doble histórico de Victor Wembanyama.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 6 meses.
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Los San Antonio Spurs igualaron este viernes su peor racha histórica con 16 derrotas seguidas tras caer ante los Chicago Bulls por 112-121 a pesar de una actuación histórica de Victor Wembanyama.
El prodigio francés, de 19 años y número uno del último draft, consiguió 21 puntos, 20 rebotes, 4 asistencias y 4 tapones y se convirtió en el jugador más joven en la historia de la NBA en lograr un doble-doble de 20-20 en puntos y rebotes.
La NBA detalló en la red social X (antes conocida como Twitter) que Wembanyama, con 19 años y 338 días, superó por solo cuatro días a Dwight Howard, que logró el récord anterior en 2005 con 19 años y 342 días.
De nada sirvió la gran actuación de ‘Wemby’ para los Spurs, ya que los de Gregg Popovich igualaron su peor registro histórico de 16 partidos seguidos perdiendo, algo que ya les ocurrió en el curso 2022-2023.
Su próximo encuentro es el lunes en Houston en un duelo texano contra los Rockets.
Sotaneros del Oeste con un desmoralizador balance de 3-18, los Spurs no ganan desde el pasado 2 de noviembre, cuando se impusieron a los Phoenix Suns para ponerse con un prometedor 3-2 que a estas alturas ya está más que olvidado.
El único ‘consuelo’ para los Spurs es que los Detroit Pistons atraviesan un momento aún más triste que ellos: 19 derrotas seguidas (peor racha en la historia de la franquicia) y últimos del Este con el peor balance de la liga (2-20).
Los Spurs desperdiciaron esta noche una ventaja de 13 puntos en el segundo cuarto y finalmente sucumbieron ante unos Bulls (9-14) que han resucitado de repente con cuatro triunfos seguidos cuando parecía que su proyecto entraba en fase de liquidación.
Coby White (24 puntos y 6 asistencias), Nikola Vucevic (21 puntos y 16 rebotes, 10 de ellos ofensivos), DeMar DeRozan (20 puntos, 6 rebotes y 10 asistencias) y Patrick Williams (20 puntos y 6 rebotes) comandaron la coral actuación de unos Bulls sin el lesionado Zach LaVine.