¡Que venga Puerto Rico!

Eso escribieron en Twitter un par de fanáticos acérrimos de la Universidad de Louisville que no sabían lo que les esperaba a su adorado equipo durante su serie de fogueos en Puerto Rico ante la preselección nacional, y que el miércoles en la noche tuvieron que lidiar con una paliza por 34 puntos, 96-62, ante poco más de 1,000 fieles en el coliseo de José Miguel Agrelot.

Liderados por Ángel Vassallo con 21 puntos, incluyendo cinco triples, y un ataque altruista que incluyó 28 asistencias colectivas, Puerto Rico arrancó al frente en el marcador y no miró hacia atrás.

Aparte de una sólida defensa ante un equipo de Louisville que carece de figuras ofensivas de renombre, la puntería a larga distancia estuvo presente para Puerto Rico desde el inicio y no tardó mucho en que los boricuas ampliaran una ventaja por doble cifra, 17-7, luego de tirada libre de Maurice Harkless con 2:40 en el reloj.

Pero el golpe al hígado vino a inicios de la segunda mitad, donde Puerto Rico tenía ventaja de, 34-22, y la amplió a 23 tantos en un abrir y cerrar de ojos gracias a avance de 14-6 iniciado por tapeo y triple de Harkless, sumado a triples de Larry Ayuso y dos de Vassallo para tomar delantera de, 45-28, restando 6:00 minutos en el tercer parcial.

El mayor problema entonces para Louisville es que a pesar de su deseo inherente de querer presear a cancha completa para poder meterse de lleno en juego, no podían hacerlo porque no metían ni un coco en la playa. Así las cosas, Puerto Rico llegó a ampliar su ventaja por 31 puntos, 64-33, al terminar el tercer periodo con cesta de Ramón Clemente.

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Para el cuarto parcial, el partido ya estaba decidido y aun así Puerto Rico jugaba con gran intensidad, entre ellos Kevin Young, que montó fiesta de donqueos que deleitaron a los presentes, mientras que Clemente también se le unió a la comparsa.

Al final, los jugadores de Louisville abandonaron el tabloncillo malhumorados y frustrados, incluyendo su centro Chinanu Onuaku, que tuvo que se escoltado por el asistente David Padgett para evitar que peleara con alguno de los jugadores boricuas tras culminar el desafío.

“La diferencia entre el partido cerrado del martes y este juego es que para éste salimos a jugar duro desde el saque y no les dimos ninguna oportunidad de recuperarse”, dijo Harkless a Primera Hora. 

“De hecho, el dirigente (Rick) Pitino me dijo que de la única manera que saldría del juego temprano a descansar sería si teníamos una ventaja holgada, así que al principio de la segunda mitad terminamos de enterrarlos y ahí me pude sentar”, agregó Harkless entre risas.

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Por su parte, Pitino resaltó el trabajo defensivo colectivo de los boricuas y el énfasis en el pase extra.

“Hoy el triple entró, pero muchos de ellos fueron gracias al buen movimiento de balón, las cortinas y el pase extra”, indicó Pitino.

“Pero lo más que me gustó fue la defensa. Fueron tenaces de principio a fin velando las líneas de pase y ‘switcheando’ en defensa. Y la actitud fue muy buena. Damion Lee venía de anotar 36 puntos la noche anterior y Vassallo dijo ‘yo lo tengo’. Y rápido salió Richard Chaney y dijo ‘yo lo tengo cuando tú no estés’. A fin de cuentas lo dejaron en nueve puntos y Louisville tuvo muchos problemas para anotar”.

Por Puerto Rico, Devon Collier agregó 13 puntos, seguido de Ayuso con 12 y Clemente con 11. Louisville fue encabezado por Jaylen Johnson con 12 puntos, mientras que Quinn Snyder agregó 11.  

Los boricuas no utilizaron en el partido a José Juan Barea, Renaldo Balkman, Carlos Rivera e Isaac Sosa. Por otra parte, el alero John Holland salió de juego con 9:25 del segundo parcial tras sufrir una lesión en el dedo gordo del pie izquierdo y será sometido a placas y evaluado por el Dr. Manuel Hernández el jueves en la mañana.

Ambos quintetos se miden otra vez esta noche a las 8:00 p.m. en el coliseo Mario “Quijote” Morales de Guaynabo.

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