La llegada a Colombia de la Selección Nacional en la recién concluida ventana FIBA no fue directa desde Brasil, sino con escala de regreso a Miami para algunos jugadores, o por vía de Panamá para otros, reveló este lunes el presidente de la Federación de Baloncesto de Puerto Rico, el Lic. Yum Ramos, a su arribo a la Isla hoy en la tarde.

Puerto Rico tenía programado llegar el viernes a Colombia directo desde Brasil, luego de ganar en ese país el jueves. En su lugar, sin embargo, y luego de múltiples cambios en el calendario de viajes, el seleccionado llegó a Bogotá, Colombia, en la madrugada del domingo para jugar esa noche el decisivo juego que le ganó la clasificación a la Copa del Mundo.

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“No perdimos vuelos. Lo que sucedió fue que, cuando llegamos al aeropuerto de Porto Alegre, Brasil, la línea aérea nos dijo que para llegar directo de Brasil a Colombia necesitábamos la vacuna contra la fiebre amarilla”, dijo Ramos sobre el obstáculo que le tomó por sorpresa porque no era un requisito preavisado por la línea.

Ramos dijo que se comunicó con FIBA y que el organismo le dijo que tampoco sabían sobre ese requisito.

Ramos dijo que la alternativa fue comprar pasajes alternos, algunos de los cuales fueron por el puerto de Miami y otros por Panamá.

“Compramos pasajes nuevos y algunos nos fuimos por Miami. Al final, la misma línea aérea permitió que parte del grupo fuera a Panamá y de ahí directo a Colombia. Nada son cosas que pasa”, dijo Ramos.

La situación fue revelada sin detalles por el dirigente nacional Nelson Colón durante la conferencia de prensa que sucedió a la victoria del domingo en Colombia. Colón dijo entonces que no revelaron la situación previo al juego ante Colombia para evitar dar excusas y usar de motivación los contratiempos.

Chris Ortiz celebra un canasto en el juego en Colombia. (FIBA)
Chris Ortiz celebra un canasto en el juego en Colombia. (FIBA) (Suministrada)

Luego de todo, la Selección derrotó apretadamente a Colombia el domingo. El partido comenzó con el cuarto periodo empatado a 60-60.

“El equipo estaba cansado, destruído. No pudimos ni practicar en Colombia. El trabajo de los fisioterapeutas fue excelente. Nos recuperamos. Fuimos al gimnasio en la mañana. Vimos los videos. Estábamos mentalmente listos. Aceptamos el reto de Colombia. Esas son las cosas que te hacen crecer como grupo. Nadie estaba peleando. Nadie se quejó. Dijeron: ‘si tenemos que viajar 36 horas, lo hacemos para llegar a Colombia y ganar ese juego”, dijo Colón.