En las pasadas tres décadas, ha sido normal ver a baloncelistas nacidos y  criados en Estados Unidos cuyo vínculo sanguíneo los conecta con Puerto Rico y visten el uniforme del Equipo Nacional.

Esa tendencia inició en la década de 1970, principalmente con hijos de puertorriqueños que emigraron a lo que fue, durante muchos años del siglo pasado, el centro de la diáspora boricua: la ciudad de Nueva York.

La Selección que representó a Puerto Rico en los Juegos Panamericanos de 1979, celebrados en San Juan, contaba en su plantilla con ocho jugadores nacidos o criados en la Gran Manzana. Leyendas del baloncesto boricua como Raymond Dalmau, Angelo Cruz y Georgie Torres eran parte de esa cepa de nuyoricans que jugaron por los colores patrios. 

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De esta premisa parte el documental Nuyorican Básquet, escrito y codirigido por Ricardo Olivero Lora.

“El Nuyorican Básquet surge de conversaciones con mi hermano mayor (Fernando Olivero), que trabaja en el Programa de Desarrollo de Selecciones Nacionales, y  están haciendo captaciones  en Puerto Rico y en ciudades de Estados Unidos. Estaban en Nueva York y me habló de unas personas que había conocido en el Barrio y que habían sido personas claves en la historia de ese baloncesto neoyorquino, y me sugirió que encontrar la génesis de eso sería un buen material para un documental. Inmediatamente le arranqué la idea”, explicó Olivero en una entrevista reciente con Primera Hora.

Olivero Lora entonces se dio a la tarea de participar hace dos años en la convocatoria de la Corporación de Cine y su proyecto fue elegido para recibir un préstamo para la realización del documental. Desde que recibió los primeros fondos, comenzó la etapa de investigación, preproducción y espera comenzar la filmación a finales de agosto.

“Hice la primera parte de la investigación: contactar a todos los jugadores, a reunirme con ellos, a hacer preentrevistas con ellos. Tan pronto recibimos ese primer desembolso del préstamo, nos fuimos a Nueva York a culminar la investigación que empezó acá”, dijo Olivero, quien comparte la dirección del filme con Julio César Torres.

 En Nueva York, Olivera visitó los lugares, los projects, donde se criaron esos jugadores, las escuelas, las canchas donde jugaban, pues estos jugadores llegaron a la Isla con una manera particular de jugar y también con una cultura particular.

Como parte de esa mezcla cultural en la diáspora que también es parte de la identidad puertorriqueña, como ha sido el deporte a lo largo de la historia, Nuyorican Básquet abarcará muchos ángulos, sin apartarse de su tema principal.  

“Hay otros subtemas que han aparecido. Se toca mucho  el tema de la identidad nacional que, en el caso de Puerto Rico,   el deporte y la cultura son el bastión de lucha”, dijo, por su parte, el periodista y escritor Hermes Ayala, uno de los investigadores principales del filme. “La intención es que el proyecto se convierta como en un libro de texto, que el documental sea como una pieza de historia para darle una nueva mirada al básquet”.

En ese estudio cultural que parte del baloncesto, otros elementos, como la música, tendrán  mucha relevancia.

“Furito Ríos va a ser el compositor de la música original del documental, y  va a ser un documental donde el componente musical va a ser importantísimo”, explicó Olivero, quien realiza su primer documental.

Olivero espera que Nuyorican Básquet, que ya cuenta con un perfil en Facebook, esté listo para principios del 2016.

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