Caracas.  Más doloroso, imposible.

Todo atleta sueña con ser parte de uno de esos partidos de película, en los cuales un campeonato se decide en cuestiones de segundo. 

Lamentablemente para Puerto Rico, a los nuestros les tocó el lado lleno de angustia, el de sufrimiento, el de perder después de estar tan cerca de la gloria de la victoria.

La Selección Nacional falló la noche del miércoles en conseguir la medalla de oro del Premundial de baloncesto de las Américas, al caer en un partido de infarto, 91-89, contra México en el Poliedro de Caracas. Los boricuas se tuvieron que conformar con una presea de plata y el pase al Campeonato Mundial de España 2014, conseguido el pasado fin de semana.

Fue un decepcionante final para una Selección que comenzó el torneo como favorito para la presea dorada, la que hubiera sido su primera en un Campeonato de las Américas desde el Preolímpico de Neuquén 1995. 

“Lo que nos invade es una gran decepción”, confesó el dirigente de Puerto Rico, el español Francisco “Paco” Olmos. “El primer objetivo era ir al Mundial, y lucimos bien. Luego, era conseguir el oro. Llegamos donde quisimos, pero no fuimos el equipo que teníamos que ser para poder alzar el bonito metal”, añadió Olmos.

Todo Puerto Rico sufrió con este partido de infarto, en el cual lo boricuas tuvieron dos oportunidades para la victoria. Con 10 segundos por jugar, y el marcador 90-89 a favor de México, Carlos Arroyo bajó el balón pero su pase fue directo a las gradas.

Luego, Paul Stoll falló el segundo de dos tiros libres, lo que les dio otra oportunidad a los boricuas. José Juan Barea corrió la cancha a toda prisa y le pasó el balón a Alex Galindo, quien quedó solo detrás de la línea de tres puntos. Pero su tiro no encontró el fondo de la malla, lo que desató una alocada celebración de la selección azteca sobre el tabloncillo del Poliedro. 

Para México no solo fue su primera medalla de oro en un Campeonato de las Américas, sino que es su primera presea –de cualquier color- desde que comenzó el actual formato en 1980. 

“Si se la tengo que dar a Galindo 10 veces, se la voy a dar 10 veces. Estaba bien solo, hizo el tiro en ritmo. Era eso, o yo atacar hasta el final con dos encima”, enfatizó Barea luego del encuentro.

A pesar del sufrido revés, Barea mantuvo su buen temple al hablar con periodistas tras el partido. 

“Queríamos ganar, pero mucho crédito al equipo mexicano. Nosotros nunca nos quitamos. No fue la mejor defensa de nosotros, pero tuvimos el tiro. A veces se pierde, y a veces se gana. Pero estoy bien contento con la representación de Puerto Rico en este torneo, jugamos en equipo, jugamos bien hasta el final, que es lo importante”.

Puerto Rico nunca encontró el ritmo defensivo que tanto éxito había dado en partidos anteriores. México tiró para 52% de efectividad (62-32) y cuatro de sus jugadores anotaron en doble cifras, encabezados por los 23 tantos de Jovan Harris. 

“El partido vino por momentos de ataques buenos, nunca dominamos la defensa, sobre todo la primera parte. Ellos (México) nos hicieron daño en todas las facetas”, evaluó Olmos.

Para Puerto Rico fue su cuarto subcampeonato en un campeonato continental, el último de ellos alcanzado en San Juan 2009. 

Mientras, México celebró en grande su conquista continental. Nada mal para un equipo que llegó invitado tras la suspensión de Panamá. “Hemos llegado a esta situación por esa capacidad de sacrificio, esa constancia y humildad con la que hemos venido al torneo”, expresó el dirigente de México, Sergio Valdeolmillos.   “Se ha visto que somos capaces de competir. Hemos demostrado una gran mentalidad, un juego bonito”.

Por Puerto Rico, Arroyo marcó 23 puntos, seguido de 20 tantos de Barea. 

El pívot mexicano Gustavo Ayón fue nombrado como el Jugador Más Valioso del torneo. Ayón también integró el Equipo Ideal del torneo, acompañado por Barea, Renaldo Balkman y los argentinos Facundo Campazzo y Luis Scola.

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