Mientras el Equipo Nacional de Baloncesto femenino se preparaba ayer para sus próximos compromisos internacionales, una prominente figura que le dio gloria a Puerto Rico en el tabloncillo observaba desde la distancia.

Como parte de su proceso de rehabilitación luego de la sentencia que le fue impuesta por posesión de drogas, José “Piculín” Ortiz estará trabajando con FIBA Américas hasta cumplir con las 600 horas de labor comunitaria que le fueron requeridas.

“Piculín está haciendo y aprendiendo de todo”, sostuvo Jenaro “Tuto” Marchand, secretario general emérito de FIBA Américas, quien aseguró que su labor es parte de un acuerdo con su oficial probatorio.

“Él (Ortiz) cumple con su compromiso y el baloncesto se nutre de sus conocimientos”, agregó.

El ex baloncelista observó ayer una de las prácticas la Selección femenina que participará en el torneo Centrobásket, que inicia hoy en el coliseo José “Pepe” Huyke, en Morovis.

Y aunque prefirió mantenerse como un mero espectador, no pudo evitar alabar el talento con que cuenta la Selección boricua.

“A pesar de que no hay mucha estatura, creo que el dinamismo que tienen y el deseo de trabajo es grande. Creo que la condición física es excepcional”, dijo Ortiz a Primera Hora durante la sesión de entrenamiento del conjunto en el coliseo Antonio R. Barceló, en Toa Baja.

Por otro lado, opinó que las jugadoras deben sacarle provecho a su rapidez.

“Es obvio que están enfatizando mucho en la defensa en conjunto por la falta de estatura. Por la rapidez que tienen, es necesario aplicar una intensa defensa en el juego. De su fogosidad defensiva pueden generar ofensiva”, sostuvo.

“Es un grupo que está dispuesto a trabajar unos con otros y eso es bien básico”, concluyó.