Lo que funciona no se cambia. Al menos eso es lo que piensa José Juan Barea sobre la más reciente polémica del Baloncesto Superior Nacional (BSN), luego de aprobarse un nuevo formato de torneo para la temporada 2025 que hará que los campeones de las divisiones sean quienes disputen la final.

“Lo único que yo digo es, ¿por qué nos complicamos la vida? La liga está mejorando, va bien y nos ponemos a cambiar las reglas, como añadir refuerzos y tener un nuevo formato. Con esto, confundimos a los fanáticos”, opinó Barea en un aparte con la prensa tras la conferencia de prensa para anunciar un campamento para niñas de la JJ Barea Foundation.

“Aquí no hay que montarse en avión. Para mí, tú coges los mejores ocho de los 12 equipos, si quieres hacer un ‘Play-In’, como en la NBA, y de ahí pues vamos a matarnos. No hay que complicarnos mucho. Nos ponemos a cambiar las cosas, cuando yo entiendo que no hay necesidad, pero ya se tomó la decisión. Si el presidente tomó esa decisión, pues yo entiendo que hay que respetarla y vivir con lo que hay. Yo puedo dar mi opinión, pero esa es la decisión que tomó”, abundó el dirigente de los Mets de Guaynabo.

Este nuevo modelo fue aprobado en febrero de 2024, cuando fue presentado por el apoderado de los Atléticos de San Germán, José “Cheo” Rivera. La votación para avalar la medida culminó empatada, 6-6, con todos los equipos de la División B a favor, mientras que las franquicias de la División A estuvieron en contra.

A raíz de esto, el presidente del BSN, Ricardo Dalmau, tuvo el voto del desempate y dio paso a la enmienda para la campaña 2025. La División A está compuesta por Guaynabo, Carolina, Caguas, Manatí, Santurce y Bayamón, entiéndase los quintetos del área metropolitana. En tanto, la División B está conformada por Arecibo, Aguada, Quebradillas, Ponce, Mayagüez y San Germán.

De acuerdo con unas expresiones de Rivera en el pódcast de los Atléticos, el nuevo formato estará vigente hasta la temporada 2027. Sin embargo, los tenedores de la División A presentaron a mediados de diciembre una petición a la liga para impugnar esta decisión. Los directivos de la División B respondieron hace dos semanas a esto con una moción de desestimación, alegando que la querella no cumplió con un término reglamentario de 20 días a partir del momento que ocurrieron los hechos.

“Yo he guiado mil veces de Mayagüez a San Juan y es un quitado’. Es una tontería. Vamos a ver qué pasa, pero espero que sea para bien. Uno nunca sabe, puede ser que sea mejor o peor. Yo entiendo que, si las cosas están funcionando, no se deben cambiar”, señaló Barea, quien tomó las riendas de los Mets en la pasada temporada.

“Yo entiendo que los fanáticos saben que se va a beneficiar la división que esté más débil, como sucede en la NBA”, agregó.

El cambio de Benito fue “difícil”

Como dirigente Guaynabo, Barea lideró a la escuadra metropolitana al primer puesto de la entonces Sección B, con un récord de 21-13. Aun así, fueron eliminados en seis juegos por los Leones de Ponce en los cuartos de final.

Los Mets no habían hecho ruido durante la temporada muerta hasta que en Año Viejo concretaron un cambio con los Cangrejeros de Santurce para adquirir a Emmy Andújar. En el traspaso, Guaynabo envió a Santurce a Benito Santiago Jr. y un turno de primera ronda del Sorteo de Nuevo Ingreso de 2028.

“Fue un cambio difícil. A mí me gusta mucho Benito, y me jugó muy bien el año pasado, pero esto es un trabajo. Los dueños querían a Emmy, a mí me gustan ambos. Como grupo, tuvimos una votación y salió Andújar. Pero, estoy bien contento con el cambio. Andújar nos va a ayudar mucho defensivamente. Es un jugador inteligente, que ha ganado campeonatos y puede bajar la bola. Hace muchas cosas diferentes”, comentó.

Andújar promedió 9.3 puntos, 5.4 rebotes y 3.4 asistencias en la pasada campaña con Santurce. Santiago Jr., por su parte, acumuló una media de 10.1 unidades, 3.7 rebotes por juego y 1.2 asistencias con Guaynabo.

Barea también adelantó que para la venidera temporada, que arranca el 15 de marzo, los refuerzos de los Mets serán un armador, un delantero y un centro.