Lille, Francia. Aún en la derrota, la Selección Nacional femenina de baloncesto fue aplaudida por el público francés en el Coliseo Pierre Mauroy, en donde un corillo boricua esperó a las jugadoras para ponerlas a bailar ‘la pelúa’.

La Selección boricua salió ‘ganando’ de su partido del domingo ante Serbia gracias a una gran remontada que le acercó al triunfo antes de caer por 58-55 en su debut en los Juegos Olímpicos París 2024. También salió celebrando.

“A pesar de que salimos con la derrota, salimos contentas. Hicimos un gran trabajo, Hicimos una remontada de 20 puntos. Demuestra que estamos listas para este nivel”, dijo la armadora Pamela Rosado. “Serbia es un gran equipo. Sabemos que nos vamos a enfrentar a grandes equipos y estar a una posesión de empatar es grande para Puerto Rico. Venimos a competir. Venimos a darlo todo”.

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La clave del retorno de Puerto Rico fue el juego físico. Cuando parearon el juego del golpe que les presentaron las serbias, con la permisología que permitieron los árbitros, las Guerreras lograron acercarse a su rival y hasta pudieron haber sacado la victoria.
La clave del retorno de Puerto Rico fue el juego físico. Cuando parearon el juego del golpe que les presentaron las serbias, con la permisología que permitieron los árbitros, las Guerreras lograron acercarse a su rival y hasta pudieron haber sacado la victoria. (Xavier Araújo)

La Selección perdía 55-37 en el tercer periodo y con un avance de 13-0 se metió en juego. Ganó el cuarto final por 19-3. Tuvo la posesión para empatar a 57 con 24.3 segundos, pero Serbia detuvo una penetración de Rosado. También tuvo una posesión de 6.3 segundos para igualar a 58, pero el tiempo no le bastó. Falló tristemente, por su gran intensidad, varios intentos previos que pudieron ser la diferencia.

El público reconoció el esfuerzo de la Selección liderada por Rosado.

De hecho, Rosado salió del banco el domingo por primera vez en su era con la Selección adulta, dijo el dirigente Jerry Batista. Y al entrar a juego metió un triple que se lo dedicó a su dirigente con una señal y una mirada.

“Eso fue para Jerry”, confirmó Rosado a Batista mientras ambos daban entrevistas luego del partido. “Se lo dediqué a Jerry, realmente”.

La Selección agradece el apoyo que se gestó en la arena a su favor, de parte de fanáticos en general que se unieron al público boricua, admirando la gran gesta que realizaron en la segunda mitad.
La Selección agradece el apoyo que se gestó en la arena a su favor, de parte de fanáticos en general que se unieron al público boricua, admirando la gran gesta que realizaron en la segunda mitad. (Xavier Araújo)

Las jugadoras devolvieron el cariño con saludos y firmas de autógrafos.

Fuera del estadio, los boricuas presentes en el juego montaron una sesión de bomba y plena instrumentada y cantada para recibir a las jugadoras y reconocerles también el esfuerzo.

La Selección cayó en posición de remontada luego de que Serbia le montó una defensa desde arriba en la cancha y con una doble defensa una vez pasaba la mitad de la cancha. Quitó el balón de esa manera o provocó que Puerto Rico tomara incómodos tiros. Y convirtió en su lado de la cancha para ganar 23-15 los primeros 10 minutos y 43-26 la primera mitad.

Batista dijo que sabía que Serbia iba a presionar de esa manera y agregó que le sorprendió igualmente.

“La presión nos hizo mucho daño. Sabíamos que venían con la presión y nos preparamos para la presión, pero no es lo mismo prepararse en acción fuera de juego, que recibir la presión en juego”, dijo Batista.

Pero la Selección manejó la presión de Serbia en la segunda mitad y ganó ese segmento por 29-15, incluyendo un periodo final de 19-3 luego de hacer unos ajustes en el camerino entre mitades de juego.

“Fuimos al camerino y hablamos sobre hacerlo diferente para que ellas no nos doblaran y lo hicimos. Nos pusimos en una ruta más larga para que a ellas se le hiciera más difícil doblarnos”, Batista.