Lille, Francia. La actuación de Pamela Rosado el domingo en el primer partido del Equipo Nacional de Baloncesto Femenino en los Juegos Olímpicos París 2024 ante Serbia se puede interpretar de dos maneras, incluida la de ella.

La jugadora de 38 años salió del banco el domingo y terminó siendo la jugadora de más minutos en la cancha, además de que fue bujía en una remontada de doble dígitos que, aunque corta, se llevó la apreciación de la fanaticada en el Coliseo Pierre Mauroy de esta subsede de los Juegos Olímpicos París 2024. Rosado hizo todo eso en su primer juego internacional con la Selección en el que apareció como una jugadora que salió del banco.

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Esa ejecutoria dice que Pamela Rosado tiene gasolina en su tanque para seguir representando a Puerto Rico, como lo ha hecho durante tantos años y contrario a su deseo de retirarse como jugadora, como lo expresó antes de llegar aquí.

Pero ella, dueña de su vida, tiene qué decir sobre lo acontecido el domingo.

“Estoy dejando todo aquí”, dijo con la voz quebrantada. “Me preparé para estar aquí. Trabajo todos los días bien duro para terminar bien por Puerto Rico. Sí pienso que son mis últimas y estoy súper emocionada de representar a Puerto Rico a este nivel, por segunda vez en una Olimpiada. Así que súper contenta”.

Dicho y… todavía falta el hecho.

Rosado sigue teniendo fuego competitivo, tanto como para suplir al globo que aquí sirve antorcha de estas Olimpiadas --el que de paso no contiene fuego real--, y como para hacerle recordar al dirigente Gerado ‘Jerry’ Batista que no la vuelva a sacar del cuadro titular. Batista dice que Rosado nunca había salido del banco en su era con la Selección adulta.

Ese fuego se lo dejó saber a su dirigente tan pronto la llamó a la cancha. De cantazo, Rosado contestó inmediatamente con un triple, seguido por un gesto dirigido a Batista que claramente dijo ‘Pa’ ti, Jerry’.

Así lo confirmó la jugadora, con su dirigente al lado, luego del partido del domingo en la zona de entrevistas. Batista dijo que decidió sacarla del banco para tener en la reserva una jugadora que impactara el juego.

“Eso fue para Jerry”, confirmó Rosado a Batista mientras ambos daban entrevistas luego del partido. “Se lo dediqué a Jerry, realmente”.

También tiene el juego. Ante un equipo de Serbia con estatura, Rosado hizo ocho puntos, incluidos dos triples. Repartió siete asistencias y se robó dos balones, además del corazón de los presentes.

A su salida de la cancha, y luego de un aplauso colectivo para Puerto Rico y su esfuerzo ante Serbia, Rosado caminó fuera de la cancha por el túnel hacia los camerinos con música para los oídos y el espíritu: un sólido aplauso de la fanaticada hacia ella.

Debe haber sido un gran momento, lo que confirmó

“Hermoso”, describió sobre el aprecio a la fanaticada.

“Es un orgullo representar a Puerto Rico a este nivel. Es una señal de que la gente nos respeta, tanto los fanáticos de Puerto Rico como los de otros países. Pudimos ver esa cancha aplaudiéndonos. Estoy súper emocionada por lo que acabamos de ver”, dijo.

Su dirigente, que ha sido su entrenador desde que ella era más joven, dijo que tener a su jugadora de regreso es un privilegio y la describió con todos los títulos de grandeza.

“Ha sido una jugadora que ha entregado su cuerpo y alma, su entrega al País; es una miembro del Salón de la Fama, legendaria, única en su generación. Hemos tenido grandes jugadoras, pero no hemos tenido a una jugadora como Pamela por los éxitos que ha tenido. A sus 38 años parece de 23 años”.

“Es una de las más exitosas que ha tenido el País”, añadió sobre la multicampeona del BSN y medallista en Juegos Centroamericanos y del Caribe. “Me siento súper orgullosa de tenerla, de haberla dirigido. La conozco desde pequeña. Es una ganadora. Como yo le digo ‘mientras sigas jugando así no tengo problemas de que sigas jugando’. Es muy orgullosa. Se prepara. Lo que hizo hoy (domingo) demuestra mucho nivel”.