Ponce. Puede que los Leones de Ponce estén incompletos y hasta carentes de uno de los tres refuerzos a los que tienen derecho, pero parece que ni ellos mismos se han enterado.

Con una defensa férrea que parece alimentarse de la enorme energía que transmite la fanaticada ponceña que abarrotó por segunda ocasión el Auditorio Juan ‘Pachín’ Vicéns, los Leones volvieron dar cátedra de entrega deportiva cuando amilanaron a uno de los equipos favoritos del Baloncesto Superior Nacional al derrotar vía paliza a los Capitanes de Arecibo, 97-75, el jueves en la noche.

“Quizás estamos incompletos y no tenemos mucho banco, pero hemos salido a jugar con una energía enorme y por eso estamos 2-0. El corazón de este grupo es grande”, manifestó un jubiloso Nelson Colón, luego de la victoria de de su manada.

“Hemos dominado los rebotes, hemos jugado gran defensa colectiva, hemos trabajado en grupo. La fanaticada los ha inspirado y los muchachos se están gozando ser parte del resurgir de esta franquicia”.

Aparte del importante empuje emocional que han disfrutado los Leones, la parte técnica también cumplió su función, en particular los ajustes defensivos frente a los Capitanes.

“Arecibo no tienen a un manejador per sé. Están sacrificando a (Carlos)  Escalera de ‘uno’ y no se ven organizados en ofensiva. Supimos identificar eso temprano  y con varios preseos a media cancha ya cancha completa les hicimos mucho daño”, manifestó Colón.

“Además, le negamos el balón a Peter (John Ramos) y los sacamos de ritmo. Fue un gran esfuerzo colectivo en defensa”.