Mucho que probar los Gallitos de Isabela
Esperan contar con la presencia del escolta Darnell Hinson.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 13 años.
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Dicen que en el caos surgen oportunidades.
Al menos eso esperan el nuevo dirigente de los Gallitos de Isabela, Omar González, y muchos de los jugadores jóvenes que compondrán la nueva plantilla de ese equipo.
Un pequeño vistazo a este equipo denota una abundancia de jugadores que aún no han podido hacerse nombre en el Baloncesto Superior Nacional, pero que en Isabela tendrán la oportunidad de demostrar su valía y ayudar a esta plantilla joven a crecer junta, crear cohesión y en un par de años poder ser un contendor.
Entre los jóvenes que sobresalen, figuran Jesús Verdejo, Florentino Valencia y el debutante Rubén Cotto, que serán candidatos esta temporada para los galardones de Mayor Progreso, Regreso del Año y Novato del Año, respectivamente. Debido a que dicho trío será parte del cuadro abridor, podrá poner números desde el día inicial y tendrá sobre sus hombros gran parte de la responsabilidad de tratar de clasificar a Isabela en el octavo y último puesto disponible para playoffs en batalla con los Caciques de Humacao y los Maratonistas de Coamo.
Lamentablemente para Isabela, su cañón grande, Alex Galindo, que vino en el canje por Ángel Vassallo y milita en la liga de Argentina con Libertad Sunchales, no llega hasta fines del mes de abril. En el caso de Darnell Hinson, podría estar aquí para la segunda semana.
En lo referente al alero Rafael “Chamo” Pérez, el novato Jason Johnson y el base Filiberto Rivera, es improbable que vistan el uniforme gallito en el 2011. Pérez se fue a jugar a su natal Venezuela, Johnson aún se recupera de su accidente automovilístico, y Rivera llega tarde de Israel y es material de cambio.
González, natural de Isabela, es la persona indicada para levantar esta franquicia desde cero junto con Edgar Padilla. Ambos son buenos maestros y prepararán a estos jóvenes con eficacia para sacarles el máximo, no tanto pensando en resultados inmediatos, sino en el éxito futuro.
Inicialmente se nutrirán del hambre que tienen muchos de sus jugadores de querer lucir en esta liga y podrán sacarles la milla extra en defensa, que es lo que más utilizarán para provocar turnovers y crear ofensiva en transición. Valencia promete ser una máquina de rebotes y a Cotto hay que echarle el ojo por su fina puntería.
¿Por dónde empezar? Es un equipo que empieza desde la nada, con poco talento probado, en pleno proceso de creación de química, con sus mejores canasteros ausentes y con dos refuerzos que no son dominantes. Es una batalla cuesta arriba en Isabela, aunque cuente con una de las más ruidosas fanaticadas del país.
Les doy cinco triunfos, pero hay quienes apuestan a que ni llegan a eso. Al menos tendrán el primer turno en el sorteo de 2012 para escoger entre Víctor Dávila, Jio Fontán o Iván Aska.