Los Vaqueros de Bayamón ya han derrotado a ocho de los once equipos contra los que compiten esta temporada en el Baloncesto Superior Nacional (BSN), y en su marca de 9-0 incluyen triunfos cómodos sobre los equipos que les siguen en la tabla de posiciones: los Brujos de Guayama y los Capitanes de Arecibo.

Además, le han ganado dos veces a los Grises de Humacao y tienen triunfos sobre Santurce, Fajardo, Guaynabo, Quebradillas y Carolina.

Ha sido tan dominante el inicio de los Vaqueros que el propio dirigente de los campeones defensores, Nelson Colón, dice que no se lo cree.

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“A nosotros nos sorprende grandemente esta situación. Sí sabíamos que podíamos estar entre los primeros, pero no así”, dijo Colón vía telefónica con Primera Hora.

“Así que tratamos de que no se nos suba el ego a la cabeza. Jugamos ayer (martes), ganamos y ya estamos aquí practicando. Y practicamos mañana (hoy) antes de jugar el viernes. Estamos viviendo un día a la vez, una práctica a la vez y un juego a la vez, y creo que esa ha sido la clave”, indicó.

El viernes, cuando busquen el décimo triunfo en fila, en turno los Vaqueros tienen a uno de los tres equipos con los que no se han enfrentado aún: los Leones de Ponce.

Los otros son los Indios de Mayagüez y los Atléticos de San Germán.

¿La clave del éxito? Para Colón es una combinación de factores que inicia con la buena preparación que realizaron.

“Comenzamos dos meses antes y, por primera vez en los 14 años que llevo dirigiendo, tuvimos más de 25 prácticas con el grupo completo”, contó el dirigente.

“La burbuja y la preparación nos han dado espacio para que el grupo madure. Los objetivos y metas que tenemos están primero. Hay mucha concentración y enfoque. Aquí nos han tratado como si fuese la NBA. Yadier (Molina, apoderado), Melvin (Román, coapoderado) y todo el mundo está siempre pendiente a que los muchachos estén tranquilos y puedan enfocarse”, compartió el dirigente.

Sobre todo, Colón expresó que sus jugadores no compiten entre ellos. Al contrario, celebran los canastos del otro y apoyan al que tenga la mano caliente esa noche.

“Y no puede faltar la energía del Rancho y el fuego de los fanáticos. Lo que nos han dado ha sido excelente. En juegos de lunes o martes han venido 8,500 o 9,000 personas. Toda esa atmósfera nos empuja a seguir haciendo las cosas bien y los muchachos se están divirtiendo. La están pasando bien”, finalizó Colón.