Miami. Kenny Atkinson no necesitó meses, ni semanas, ni siquiera unos cuantos partidos para darse cuenta del potencial de los Cavliers de Cleveland.Le bastaron dos entrenamientos.

Regresemos al campamento de entrenamiento en Bradenton, Florida. Los Cavaliers estaban en su segundo día allí cuando uno de los asistentes de Atkinson le compartió algunas observaciones tempranas que han permanecido con él durante los siete meses que siguieron.

“Me dijo: ‘Somos talentosos, inteligentes y jugamos muy duro’. Ese fue el comentario inmediato”, recordó Atkinson esta semana, en su primer año como entrenador de los Cavaliers. “Esas tres cosas destacaron. Supongo que las primeras impresiones cuentan”.

Y esas impresiones resultaron ser muy acertadas.

Talentosos, inteligentes y con un estilo de juego intenso: así se resumen perfectamente estos Cavaliers.

Ahora avanzan a las semifinales de la Conferencia Este, donde enfrentarán a Indiana o Milwaukee, después de que el sembrado Número 1 de su lado del cuadro desmantelara por completo al Miami Heat con una barrida de cuatro juegos en la primera ronda.

El margen de victoria en esa serie: 122 puntos, el enfrentamiento más desigual en la historia de los playoffs de la NBA. Los márgenes de victoria en los Juegos 3 y 4, ambos como visitantes: 37 y 55 puntos, respectivamente.

“Probablemente tendrán una carrera larga ahora mismo”, dijo el entrenador de Miami, Erik Spoelstra, al concluir el Juego 4, reconociendo el mérito de los Cavs. “Están bien entrenados. Tienen un grupo que encaja y juegan de la manera correcta. Fuimos humillados, pero ellos tuvieron mucho que ver con cómo nos vimos”.

Y Cleveland ha hecho esto con sus rivales durante toda la temporada. Bueno, quizás no a este nivel; la victoria por 55 puntos en el Juego 4 fue la mayor de la temporada para Cleveland, y la de 37 puntos en el Juego 3 ahora está empatada como la cuarta más amplia del año.

Pero este equipo de los Cavs está logrando algo que ni siquiera los equipos de LeBron James en Cleveland hicieron. El margen promedio de victoria esta temporada es de 10.5 puntos por partido, encaminándose a ser el mejor en la historia de la franquicia. Solo nueve equipos han completado una temporada regular y playoffs con un margen así.

La estrella de Cleveland, Donovan Mitchell, estaba sentado junto al novato Jaylon Tyson durante la paliza del Juego 4. Su mensaje fue sencillo: “Esta es tu primera serie de playoffs… y esto no es normal”, le dijo.

“Tenemos un objetivo más grande en mente”, añadió Mitchell. “Para nosotros, se trata de entender que esto es especial. Hemos hecho cosas especiales todo el año. Pero no vinimos aquí solo para barrer en la primera ronda y llegar a la segunda”.

Hasta ahora, tienen un récord de 68-18 esta temporada, incluidos los playoffs. Solo hay dos equipos en la historia de los Cavaliers que han ganado más partidos en una temporada completa: el equipo de 2008-09 con 76-20, y el de 2015-16 —campeones de la NBA esa temporada— con 73-30.

Serán favoritos en la segunda ronda, sin importar si el rival es Indiana o Milwaukee. Y están en un gran momento. Un equipo que tuvo rachas de 16, 15 y 12 victorias esta temporada —siendo apenas el segundo en la historia de la NBA en lograrlo, junto con los Dallas Mavericks de 2006-07— sigue rodando, tal como ha sido prácticamente desde el inicio de aquel campamento en Bradenton.

“Hay una química y una sensación. Saben cómo jugar”, dijo Atkinson. “No creo que seamos súper atléticos. Pero tenemos muchos muchachos que saben jugar.”

Y también saben ganar.