La Asociación de Clubes de Baloncesto de Grecia (ESAKE) ha decidido otorgar el título de campeón de la liga griega al Panathinaikos, líder de la competición con 18 victorias y dos derrotas hasta la suspensión del campeonato por el coronavirus a principios de marzo.

La victoria del equipo del trébol fue sometida a votación por los clubes, que decidieron de forma mayoritaria -con la abstención del propio Panathinaikos y del AEK- la coronación del campeón y abogaron por mantener en la categoría a los dos clubes en puestos de descenso, Aris y PAOK de Salónica.

El Panathinaikos, que no perdió un partido de liga hasta la jornada 11, incorporó al veterano entrenador estadounidense Rick Pitino en noviembre, después de un mal comienzo de temporada en la competición europea y la eliminación en la Copa griega a manos del Promitheas de Patras en los cuartos de final.

Sin embargo, con la cuarentena y el parón liguero, el nuevo campeón griego afronta una profunda reconstrucción, con Pitino de regreso en el baloncesto universitario estadounidense y Nick Calathes, el jugador estrella del equipo, desvinculándose de la disciplina del equipo ateniense a partir de la próxima temporada.

La liga ha anunciado también que aumentará el número de equipos al mantener los dos ascensos, además de subir a 200,000 euros el canon de entrada a la competición.

Lo que todavía no se ha esclarecido es si el Olympiacos, que rechazó jugar la liga griega esta temporada como protesta por el arbitraje, se reincorporará a la máxima categoría del baloncesto heleno.