Nueva York.-  Hace 10 años hubo un recambio relevante en el Equipo Nacional, cuando José ‘Piculín’ Ortiz participó en su último torneo y un joven Peter John Ramos dio el salto del equipo juvenil al adulto en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004.

Ocupar el espacio de Piculín Ortiz era un reto gigante para igualar no solo para Peter, sino también para cualquier otro jugador. Eran unas zapatillas difíciles de llenar. Las comparaciones entre Piculín y Peter llovieron, y en la pasada década, el impacto de Peter no fue el esperado en la escuadra nacional.

Ahora para el Mundial de España se produce otro relevo. Peter no fue convocado por el técnico Paco Olmos y su espacio lo ocupa el joven Jorge Bryan Díaz.

Y la historia se repite. Díaz hará su debut en el combinado adulto en un torneo de envergadura. Solo que esta vez, los zapatos para llenar no serán tan enormes como los de Piculín. Díaz, de todas maneras, no visualiza su entrada como un jugador a reemplazar a Peter. El pívot, de 24 años y 6’11”, solo quiere dejar su propia huella sin comparaciones.

“No lo veo de esa manera”, dijo sobre ser visto como el sustituto de Peter. “Veo que hice el equipo –que es algo grande para mí– y que tengo la responsabilidad de hacer un buen trabajo”, declaró ayer Díaz, tras una sesión de práctica en el Madison Square Garden de cara un amistoso ante Estados Unidos.

“Representar a Puerto Rico es algo valioso. Este es un sueño hecho realidad. Representa mucho para mí y voy a hacer todo lo mejor que pueda para el equipo”.

Hace unos años, Díaz viene siendo señalado como uno de los principales prospectos del país en la posición del medio. Estudió en la Universidad de Nebraska y formó parte de la Selección Sub 19 que jugó en el Mundial del 2007. Ante el próximo retiro de Daniel Santiago, Díaz pasará a ocupar un rol significativo en la escuadra. Pero desde ahora, Díaz será llamado a ofrecer unos minutos de calidad como suplente de Santiago en el Mundial.

La oportunidad le llegó ante la considerable mejoría que demostró en su segunda temporada en el BSN con los Piratas de Quebradillas.

Allí fue dirigido por el veterano Carlos Calcaño, quien es asistente técnico del combinado y quien ve con buenos ojos la inclusión de Díaz en este momento.

“Jorge es el futuro de este equipo y en algún momento dado tenía que entrar. Él tiene las herramientas para ser un buen jugador internacional. Puede ser un jugador productivo. Tiene puntos en las manos dentro y fuera de la pintura y se mueve bien en la cancha. Es cuestión que desarrolle el aspecto físico y mental”, dijo Calcaño al señalar que Díaz se presenta como un pívot muy distinto a Peter.

“Son jugadores muy diferentes. Peter es un jugador de fuerza y de ofensiva. Jorge trae otra dimensión porque corre bien y tira de afuera. Él no puede darle atención al hecho que esté reemplazando a alguien”, abundó Calcaño.

Cuando Olmos anunció la inclusión de Díaz en el róster final fue normal que surgieran dudas acerca de la capacidad del canastero para competir a este nivel, cuando no se había probado en un torneo regional, al menos.

Díaz calmó al cuerpo técnico con su demostración en el reciente partido de fogueo ante Argentina en Belgrado. Aportó 14 puntos y siete rebotes en la victoria.

El propio jugador reconoció que esa actuación elevó su nivel de confianza.

“Creo que ayudó para que hayan menos dudas de mí y me ayudó en mi confianza. Voy a los juegos con más confianza. Veo el estilo de juego y estoy seguro que puedo aportar”, dijo Díaz, quien se recupera de una dolencia en una ingle y era incierta su participación anoche en el fogueo ante Estados Unidos.