Manatí. Primero eliminaron al mejor equipo en la temporada regular y ahora barrieron al campeón defensor.

Los Osos de Manatí derrotaron el jueves 88-83 a los Gigantes de Carolina en Coliseo Juan Aubín Cruz Abreu “Bincito” para completar la barrida en cuatro juegos y avanzar a su primera serie final del Baloncesto Superior Nacional (BSN).

Luego de convertirse en los primeros finalistas del torneo 2024, los Osos esperan al ganador de la otra semifinal entre los Leones de Ponce y los Criollos de Caguas, que está empate a dos por bando.

A diferencia de los otros tres partidos de la serie, los Gigantes estuvieron en control durante la mayor parte de este encuentro y llegaron a estar arriba por 11 puntos. Sin embargo, Manatí retomó la delantera con un avance de 11-4 en el cierre del cuarto parcial, que aseguró la victoria.

“Hoy no estuvo la arma ofensiva, pero estuvo la arma defensiva en el cuarto periodo. Fue un periodo de mucho carácter donde vinimos de atrás. Supimos manejar la presión y tomar las decisiones correctas en la ofensiva. Le cayó un triple grande a Ethan (Thompson), dos penetraciones grandes de Norris (Cole) y ahí el juego cambió”, expresó después del desafío el dirigente de los Osos, Iván Ríos, quien también clasificó a su primera final del BSN.

“Si yo te digo lo que estoy diciendo te voy a mentir. Es una fusión de sentimientos increíbles. Fuimos el pasado año el número 12. Este año tuvimos el privilegio de estar entre los mejores dos. Es un proceso. Es lo que hemos siempre dicho. Nuestro dueño, Juan Carlos Ozuna Rosado, es fiel creyente a los procesos, apostó a nosotros y gracias a Dios estamos aquí“, confesó Ríos a preguntas de Primera Hora.

La historia de los Osos parece ser sacada de una película de Hollywood. La plaza del norte revivió la pasada temporada tras la compraventa de los Brujos de Guayama por parte del intérprete de música urbana Ozuna. La franquicia se mudó a Manatí y decidió no usar el nombre de los Atenienses tras adoptar la identidad de los Osos. En el 2023, tuvieron un año para el olvido al registrar el peor récord en la liga con marca de 11-25, pero un año más tarde están a cuatro victorias del campeonato.

La ofensiva de Manatí volvió a ser liderada por Norris Cole, quien terminó la noche con 20 puntos, seis rebotes y cinco asistencias. Le siguió Cheick Diallo con 15 unidades y nueve rebotes. Alexander Morales aportó 14 tantos y Ethan Thompson agregó 11, viniendo del banco.

En el revés, George Conditt IV finalizó con un doble-doble de 19 puntos y 11 rebotes. Carolina contó con otras cuatro figuras en doble dígito. Tremont Waters añadió 15 unidades, mientras que Brandon Goodwin, Scottie James y Alexander Franklin aportaron 14 cada uno.

Contra las cuerdas, Carolina no pudo salvar su temporada y anotó apenas 13 puntos en el último periodo. Al sonar la chicharra que anunció el final del juego, los jugadores de los Osos se lanzaron al tabloncillo y levantaron a Cole como todo un héroe. Después de todo, eso es en lo que se ha convertido para Manatí en esta postemporada.

“Jugamos duro, creímos en nosotros y pudimos lograrlo... El dirigente confía en mí como un líder. Cuando el coach y los jugadores confían en tí, quieres ir allá fuera y jugar de la mejor manera y pude hacer eso para mí y para el equipo, que es lo más importante”, dijo Cole a este diario.

En los primeros minutos del encuentro, ninguno de los dos equipos logró establecer una clara delantera. Manatí se fue al frente por 12-9 después de un gancho de Chris Ortiz y un canasto en transición de Alexander Morales cuando restaban 4:55 minutos en el reloj.

Pero un triple de Brandon Goodwin dio inicio a una corrida de ocho puntos consecutivos de Carolina, que los colocó arriba en el marcador por 17-12.

Los Osos intentaron responder, pero los Gigantes continuaron castigándolos a larga distancia con tres triples de Scottie James, Tremont Waters e Ismael Yomar Cruz. En total, el quinteto del “Calentón” concluyó el primer periodo con seis canastos de tres y una ventaja de 28-21 sobre Manatí.

En el segundo segmento, la escuadra del apoderado e intérprete urbano Ozuna no se quedó de brazos caídos. Abajo en la pizarra por 33-27, los Osos le dieron vuelta al marcador con un avance de siete unidades detrás de canastos de Jhivvan Jackson e Isaac Sosa.

De inmediato, Goodwin intentó callar a la fanaticada de Manatí con un bombazo a larga distancia que le devolvía la ventaja a los visitantes por 36-34 cuando quedaban 3:45 minutos en el segundo parcial.

Acto seguido, ambas escuadras intercambiaron la delantera en múltiples ocasiones. Los Gigantes, sin embargo, aguantaron el empuje y terminaron la primera mitad al frente por 46-44.

Desde que arrancó el tercer segmento, los Gigantes comenzaron aumentar su ventaja, pero no fue hasta que Goodwin convirtió un canasto a media distancia que se despegaron por doble dígito con dos minutos en el reloj. Manatí trató de cortar la delantera, pero Goodwin volvió a sacarles el aire con un triple que alejaba a los del “Calentón” por 70-60 con apenas 12 segundos por jugar en el tercer parcial.

Los Osos cerraron el tercer periodo con dos tiros libres de Norris Cole, que redujeron la delantera de los carolinenses a 70-62.

Manatí no se quitó y, en el cuarto segmento, se acercó a Carolina por 75-74 tras Jackson robar un balón y atinar un canasto en transición cuando restaban 5:40 minutos en el reloj. El “Bincito” parecía que iba a estallar con una afición que estaba soñando con la primera final en su historia. Hasta ese entonces, los Osos habían dominado, 12-5, a los Gigantes en el cuarto parcial.

Ante esta situación, Carlos González se vio obligado a pedir tiempo.

Cuando regresaron al tabloncillo, Conditt IV detuvo el sangrado con un canasto en la pintura. Poco después, Carolina se alejó por 79-76 con un canasto a media distancia de Waters cuando quedaban 4:08 minutos de acción. De inmediato, Ethan Thompson hizo lo propio para empatar el marcador y alborotar las gradas.

Con la pizarra iguala, Cheick Diallo volvió a hacer de las suyas en la zona pintada y le dio a Manatí una delantera de 81-79. Acto seguido, Morales cometió una falta personal que envió a Conditt IV a la línea del tiro libre, pero este falló sus dos disparos.

Cuando el balón llegó al otro lado de la cancha, sucedió algo similar. Waters cometió una falta sobre Cole, pero este aprovechó la oportunidad desde la línea de los suspiros y convirtió sus dos lanzamientos para alejar a los Osos por 83-79.

Conditt IV redujo la ventaja a una posesión con un poderoso donqueo frente a Morales. Aun así, Manatí se mantuvo enfocado y aumentó su delantera a 87-81 tras dos canastos en transición de Cole y Morales. Y con menos de un minuto de acción, Carolina no tuvo tiempo de remontar.