Puerto Rico entra a la Copa del Mundo en España con un objetivo principal en mente: avanzar a la segunda ronda por primera vez en 12 años.

Esa meta luce  asequible, considerando que el Grupo B incluye oponentes de inferior nivel como Senegal y Filipinas. 

No obstante, la aspiración mayor debe ser poder jugar de tú a tú con los otros equipos elite del grupo,  Grecia, Croacia y Argentina. La posición exacta  entre los primeros cuatro quintetos del Grupo B podría no ser muy relevante, pues los posibles equipos de cruce con el Grupo A en octavos de final (España, Francia, Serbia y Brasil) son más complicados. Pero ganarle a uno o dos de los equipos elite del Grupo B  podría incidir en la confianza de los boricuas  para la fase de muerte súbita.

Fortalezas

No es secreto que el atributo principal de los boricuas es la capacidad creadora de sus armadores Carlos Arroyo y José Juan Barea en aislamientos uno contra uno o utilizando el pick-and-roll para liberarse y generar ofensiva para otros.

Pero  necesitan que el resto de la comparsa pueda moverse  sin el balón para mantener a la defensa adivinando. Canasteros como Ricky Sánchez, Alex Galindo, David Huertas, Ángel Vassallo, Alex Franklin y Renaldo Balkman  son eficientes por ratos en esa faena, pero necesitan hacerlo de forma consistente para evitar que los equipos contrarios  les caigan encima a golpes a los gares boricuas. 

La atención defensiva que Arroyo y Barea produzcan debe ser utilizada como ente liberador para que los actores de reparto asuman mayor protagonismo ofensivo. Estos tienen que estar listos para esa responsabilidad, y los armadores deben  integrarlos.

La mayoría de ese reparto puede anotar el triple y esa es una de las principales armas de este equipo. Sin embargo, es menester que el tiro a larga distancia se dé con tiempo y espacio y no apresurado o forzado.

En defensa, el equipo cuenta con buen personal atlético para cerrar las líneas de pase de forma efectiva  y para entorpecer el paso al canasto de los armadores rivales con dobles coberturas  arriba junto con  un hombre grande frente al pick -and-roll.

Debilidades

Aparte de Daniel Santiago,  el equipo no cuenta con canasteros que jueguen de espaldas al canasto y generen ofensiva en la pintura, lo que hará que las defensas contrarias se concentren en aglomerar el perímetro.  Por ende, el ataque depende  de que todo el mundo se mantenga en constante movimiento para que la ofensiva no se estanque ni se haga más  fácil contener a Arroyo y a Barea.

En cuanto a usar a ambos armadores juntos por tiempo prolongado, podría funcionar con equipos de menor nivel o  que tienen un backcourt no tan alto, como Argentina. Pero ante equipos europeos, es un seguro miss match que nuestros rivales aprovecharán. Está en el dirigente Francisco “Paco”  Olmos utilizarlos con sapiencia dependiendo del oponente.

En defensa, el equipo carece de bouncers que den la cara por sus compañeros si el nivel de castigo físico incrementa. La posible excepción es Clemente. Pero otros equipos tienen cuatro o cinco de esa estirpe y se ha probado que pueden sacar de concentración a los boricuas. El equipo necesita de valientes que estén dispuestos 

Predicción: Tercer lugar en Grupo B.