Henderson, Nevada. La entrenadora de las Aces de Las Vegas de la WNBA, Becky Hammon, ha negado categóricamente que Dearica Hamby, exjugadora de su equipo, haya enfrentado acoso laboral por encontrarse embarazada.

Hammon dijo en cambio que las diferencias entre ella y la basquetbolista se derivan del hecho de que Hamby fue cedida en un canje.

Considerada una de las principales figuras del básquetbol femenino, Hammon dijo en una videoconferencia de prensa que no incurrió en acto alguno que ameritara la sanción que le impuso la WNBA.

La liga femenina suspendió el martes, por dos partidos sin goce de sueldo, a Hammon, tras una investigación de un mes sobre las acusaciones de Hamby.

“Cumpliré con esto y seguiré adelante”, dijo Hammon. “Somos más grande que esto. Esto no define quiénes son las Aces ni quien soy yo. Y sí, todas estamos decepcionadas por la situación, pero al final, sabemos quiénes somos y nos vamos a dormir cada noche conociendo esa verdad”.

Hammon dio que una vez le preguntó a Hamby acerca de su embarazo. Sin embargo, no dio detalles sobre lo conversado.

“Supongo que habría que preguntarle a la liga cuál fue su interpretación”, dijo Hammon. “Pero sí, eso, hasta donde yo entiendo, fue mi falta, si quieren llamarla así”.

El año pasado, en su primera temporada, Hammon condujo a las Aces al campeonato de la WNBA. Pasó ocho campañas como asistente del entrenador de los Spurs de San Antonio, y se le considera una estrella en ascenso entre los estrategas del basquetbol.

Se le ha vinculado con el puesto vacante de entrenador en los Raptors de Toronto.