El Baloncesto Superior Nacional anunció las sanciones a los protagonistas del incidente suscitado el 4 de junio en Fajardo.

Esas fueron las determinaciones del Oficial Examinador asignado para revisar los incidentes relacionados al partido entre Cariduros y Atléticos de San Germán.

Luego de evaluar los incidentes, el oficial Sixto Román emitió los siguientes castigos:

A Eddie Casiano se le impuso una suspensión de cinco partidos de lavigente temporada al frente de los Atléticos como dirigente, gerente general o cualquier otra función que tenga con el equipo, y no podrá asistir a partidos oficiales del BSN durante dicho periodo. Además, se le impuso una multa por $4,000.

La sanción a Casiano, quien tuvo oportunidad de presentar su posición sobre los sucesos, tomó en consideración que es la tercera infracción de este tipo durante la presente temporada y a un previo compromiso que hizo con el BSN de no reincidir en la conducta.

Mientras, a Joel López, coapoderado de los Cariduros, deberá cumplir con una suspensión de un partido y no podrá asistir a juegos oficiales del BSN. Asimismo, tendrá que pagar una multa de $500.

A los Cariduros, en tanto, se les impuso una multa por el fallo en su responsabilidad de proveer la seguridad necesaria para garantizar el sano disfrute del partido.

Y al fanático que ingresó al tabloncillo de juego, identificado como Christian Rodríguez González, se le prohibirá el acceso a las facilidades deportivas de las franquicias del BSN para cualquier partidos o eventos relacionados por el resto de la temporada 2023. Además, se le informó a las franquicias participantes que deben tomar las medidas preventivas necesarias para impedirle el acceso a Rodríguez González.

El caso fue visto por Sixto Román por dos razones.

Primero, el Director de Torneo del BSN, José Couto, se encuentra fuera de Puerto Rico por un compromiso personal. Y segundo a que el día de los incidentes, el presidente del BSN, Ricardo Dalmau estuvo presente e intervino con Casiano, los árbitros y el coapoderado con la intención de poner orden. Por ello, pasó a ser parte de lo que ocurrió y no hubiese sido posible actuar como un evaluador del suceso.