La apuesta deportiva le lleva una ventaja en el marcador al BSN.

El BSN no está recibiendo beneficios económicos de las apuestas deportivas que recién comenzaron en Puerto Rico y se prepara para hacerle frente al peligro que representa ese mercado a la integridad del juego, así como para lograr un beneficio económico en el futuro, dijo el presidente del BSN, Ricardo Dalmau.

La apuesta deportiva arrancó en Puerto Rico en febrero, con la aprobación de la Comisión de Juegos del Gobierno de Puerto Rico. El BSN es desde abril la primera liga local expuesta a ese juego de azar. Pero el presidente de la liga dijo que el BSN aún no recibe un beneficio económico porque no tiene derecho sobre la data (estadísticas) que se usan las casas de apuestas para que los apostadores jueguen.

Dalmau dijo que quien tiene el derecho sobre la data es la compañía Genius Sports, que es la empresa que le lleva las estadísticas de los juegos al BSN. Esas estadísticas o base de datos, le pertenece a Genius Sports por contrato con el BSN desde hace cinco años.

“De momento, la liga no tiene forma de ganar en la apuesta a nivel Isla”, dijo Dalmau.

El acuerdo de BSN y Genius Sports finaliza este año, dijo Dalmau.

El contrato con Genius Sports fue firmado por el pasado presidente del BSN, Fernando Quiñones. El también exapoderado explicó que Genius Sports da a la Liga un cantidad de dinero “no sustancial” por el servicio y que la empresa es dueña de la data. Cuando se firmó el contrato, la apuesta deportiva no estaba cerca de ser una realidad en la Isla.

Esa data tiene un valor en el mercado de las apuestas y Dalmau dijo que, cuando haga una nueva negociación con Genius Sports u otro proveedor del servicio, procurará lograr un beneficio de la data ahora que el Gobierno de Puerto Rico permite la apuesta deportiva.

“Hay que atemperarla (el acuerdo por la data) a las realidades del mercado. Estamos en mucha mejor posición para negociar un acuerdo que se ajuste al mercado y al valor de esa data en el mercado”, dijo Dalmau.

Actualmente, la apuesta deportiva a resultados del BSN se puede realizar, solo de manera presencial, en el Casino del Mar en el Condado por el operador MGM Bett, que está en mercados internacionales y que, de hecho, se anuncia en los juegos de los Mets de Guaynabo en el BSN, específicamente en el tabloncillo y las vallas comerciales del coliseo Mario ‘Quijote’ Morales.

La publicidad de las casas apostadoras en el BSN puede ser otro recurso de ingreso para la Liga.

No hay una regulación

Dalmau dijo que están “encaminados” hacia crear los mecanismos que fiscalizarán los juegos y denuncian los arreglos de resultados, que vienen como efecto negativo de la apuesta deportiva. Ese efecto es conocido mundialmente, en donde quiera que hay apuestas deportivas.

Sabiendo la peligrosidad de la apuesta deportiva, Dalmau dijo que la liga no la puede evitar porque, nuevamente, no es dueño de la data que producen los juegos y que está en manos de Genius Sports.

El líder liguero detalló que está terminando acuerdos con entidades que fiscalizan los juegos para detectar arreglos de resultados y con otras que dan tratamiento profesional a apostadores que demuestran un comportamiento errático.

El apostador compulsivo puede terminar en una adicción, mientras que los integrantes de un deportes, ya sean árbitros, atletas u otros, pueden caer en la tentación de arreglar resultados a cambio de dinero.

Abundó que trabajan, entre otras, con un sistema de detección de fraude digital para fiscalizar los juegos, así como con la agencia de Administración de Servicios de Salud Mental y Contra la Adicción (ASSMCA) para dar servicio a los apostadores.

Agregó que trabajan con un plan de educación con los jugadores del BSN y oficiales de mesa para prevenir la apuesta y sus consecuencias. El programa educativo no ha comenzado y lo coordinan con los calendarios de los equipos, dijo Dalmau.

“Sabemos que saben, pero queremos asegurar de que conocen las regulaciones dentro del código de apuestas”, dijo

Un listado de nombres de integrantes de BSN (jugadores, árbitros, oficiales) está en manos de la Comisión como ciudadanos que no pueden participar en las apuestas al BSN.