Muchos de los mejores equipos en la historia han sido configurados con un trío de jugadores sólidos que se complementaron para ganar campeonatos.

Fue el ejemplo en los 80’s con los Celtics de Boston con Larry Bird, Kevin McHale y Roberto Parrish, y los Lakers de Los Ángeles con Earvin ‘Magic’ Johnson, James Worthy y Kareem Abdul-Jabbar. También destaca el trío dominante de Michael Jordan, Scottie Pippen y Dennis Rodman con los Bulls de Chicago en los 90’s, y la trifecta de Tim Duncan, Tony Parker y Emanuel Ginóbili con los Spurs de San Antonio en el inicio del siglo 21.

Fue lo que entonces motivó a LeBron James a irse a Miami con Dwyane Wade y Chris Bosh para llegar a cuatro series finales, y luego regresar a Cleveland con Kyrie Irving y Kevin Love para ganar un campeonato la pasada temporada.

Pero hubo, en un momento, un trío que pudo haber estado en esta conversación con los aquí mencionados y se hizo sal y agua.

Hablamos de Russell Westbrook, James Harden y Kevin Durant con el Thunder de Oklahoma City.

Dicho grupo empezó a confeccionarse en el 2007 y 2008 con la selección de Durant y Westbrook, respectivamente, por los entonces Supersonics de Seattle, y luego agregando a Harden en el 2009 cuando ya la franquicia se establecía en Oklahoma City. Por tres años dieron candela en la Conferencia Oeste, llegando a la Serie Final de la NBA en el 2012 antes de perder con el Heat de Wade, Bosh y LeBron.

Sin embargo, dicho trío se disolvió a partir de su tercer año junto pues ese mismo verano de 2012 el Thunder no pudo acordar extensión de contrato con Harden, que venía ser Sexto Hombre del Año y promediar 16.8 puntos por juego. Por tal razón, Oklahoma City optó por sí extender pacto con el entonces centro Serge Ibaka y enviar a Harden a Houston por varios jugadores. 

 Durant, posteriormente, abandonó el barco en el 2016 luego de perder una ventaja de 3-1 en la final de Conferencia del Oeste contra los Warriors de Golden State y optó por firmar precisamente con los Warriors.

¿Hubiesen coexistido?

Considerando el triple-doble que promedia actualmente Westbrook (30.4 puntos, 10.5 rebotes, 11 asistencias), los números que pone Harden (27.7 puntos, 8.0 rebotes y 11.8 asistencias) en Houston y lo bien que se ha ajustado Durant (25.7 puntos, 8.5 rebotes) a los Warriors; ¿podrían estos tres haber coexistido en la actualidad y retar por campeonatos?

En Golden State, Durant ha podido ajustarse a un sistema ofensivo que ya tenía otras voces ofensivas de peso como Stephen Curry y Klay Thompson. 

“Es imposible saberlo. Es especulativo. Al principio Harden venía del banco en Oklahoma City. Pero la realidad es que ahora él y Westbrook están poniendo los números que ponen porque tienen la bola en sus manos el 80 o 90 por ciento en cada juego de sus respectivos equipos. Permaneciendo juntos no hubiera sido así. ¿Podrían haber aguantado los egos?”, cuestionó el exdirigente nacional y comentarista de juegos NBA, Carlos Morales. 

“Al mismo Durant se le hizo difícil coexistir con West-brook, imagínate con Harden también”.

El exjugador nacional Edgar Padilla abundó sobre ese particular resaltando que los roles de cada cual en sus actuales equipos han cambiado.

“Harden necesitaba irse a otro equipo para ser el protagonista. No todo el mundo tiene el talento para ser protagonista y los Rockets vieron eso en él, rodeándolo de trespuntistas y dándole el rol de armador para repartir el juego porque él es bien difícil de contener. Algo similar sucede en Oklahoma City con West-brook, que también domina el balón y es rodeado de jugadores de rol. Pero, juntos con Durant dudo que hubiesen podido fluir como lo hacía Bird, McHale o Parrish o como lo hace actualmente Golden State con Klay Thompson, Draymond Green y Stephen Curry con Durant”, dijo Padilla.

“Por ejemplo, Thompson y Green son grandes jugadores pero no son protagonistas. Ellos se adaptan y hacen el juego alrededor de Curry y Durant. De hecho, los Warriors lideran la liga en asistencias colectivas (31.5 por juego). No creo que Westbrook y Harden pudieran hacer eso. Además, Westbrook juega a una sola velocidad: rápido. Y como dice Butch Lee: ‘Estás ganando de la manera que vas a perder’. El no saber adaptarse lo hace cometer malas decisiones bajo presión y fue el causante de que el Thunder perdiera la serie final de la Conferencia Oeste ante los Warriors a pesar de estar arriba 3-1. Por eso Durant luego optó por irse”, sentenció Padilla.