Toronto. – Brasil, literalmente, aplastó hoy, lunes, a Puerto Rico en el debut del técnico estadounidense Rick Pitino al frente del combinado en estos Juegos Panamericanos.

Los brasileños le propinaron un nocaut de 43 puntos a los puertorriqueños en la primera mitad para encaminarse a una cómoda victoria por 33 puntos, 92-59, en el inicio del torneo masculino de baloncesto.

Con 16 ‘bombazos’, Brasil acribilló a los puertorriqueños en el desafío.

Puerto Rico enfrentará mañana, miércoles, a Estados Unidos a las 9:00 p.m. y necesitará un triunfo para mantener alguna aspiración a avanzar a la ronda semifinal.

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A la conclusión del partido, el dirigente Rick Pitino no se presentó a la zona mixta para atender a los medios. Y de los jugadores, los únicos que atendieron a la prensa fueron los debutantes Gilberto Clavell y Jezreel De Jesús.

“Hoy entramos muy fríos a la cancha. No entramos enfocados”, declaró De Jesús. “No podemos entrar así para enfrentar este tipo de competencia. Espero que podamos hacer los ajustes y tener un mejor papel ante Estados Unidos”, agregó De Jesús.

De Jesús y Clavell, de paso, fueron los mejores anotadores por los boricuas con ocho puntos, cada uno. José Juan Barea lanzó de 10-2 de campo y solo sumó seis puntos, a la vez que Larry Ayuso tiró de 8-1 y agregó tan solo cuatro tantos. Puerto Rico apenas registró un 33% de campo en el juego. No tuvo oportunidades de anotar cerca del canasto ante la estatura de los brasileños. Y el tiro de tres puntos no entró al lanzar de 15-2.

Los fanáticos boricuas en las gradas lucían asombrados con el amplio revés del conjunto. En la reciente historia, Puerto Rico nunca había perdido una primera mitad por 43 puntos (60-17). Fue una verdadera pesadilla ante un rival que jugaba sobre el promedio. Brasil tiró un recital sobre el tabloncillo, especialmente, en el primer tiempo al acumular 13 canastos de tres puntos. De todos los rincones, los brasileños anotaron el tiro a larga distancia para sacar del juego a los boricuas temprano en el desafío.

Puerto Rico no fue oponente para Brasil, que dominó los rebotes 44-29 y las asistencias 24-9. Y ya a los primeros 20 minutos, el juego lucía definido. La segunda mitad fue una de puro trámite, algo inusual en la historia del combinado nacional.

“Sabíamos que lo que el coach Pitino iba a plantear con las defensas en zona y la presión sobre el balón. Así que tratamos de aprovechar esos espacios y lo hicimos bien. No solo fue que anotamos 13 triples en la primera mitad, sino en la manera que tiramos esos triples con suficiente espacio. No todos los días tiras un juego como el de hoy”, dijo el dirigente de Brasil, el argentino Rubén Magnano.

Pitino en su primer torneo oficial con la Selección reflejaba la frustración al ver como su equipo apenas podía competir ante un Brasil que también los dominaba en estatura y fuerza en la pintura.

Brasil noqueó a Puerto Rico desde el primer parcial al sumar nueve triples y tomar ventaja de 31-6 al cierre del mismo. Después de que Barea empatara la pizarra 2-2 con 8:30, los brasileños se volvieron locos atinando el tiro detrás del arco con siete triples seguidos y con un avance de 21-0 se despegaron definitivamente 23-2 con 2:49. La rotación defensiva no era suficiente. Y en el segundo parcial continuó la debacle para Puerto Rico y un triple de Leonardo Meindl le daba ventaja de 40 puntos, 51-11, con 2:19. Puerto Rico lucía impotente ante el poderío de su rival.

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Otro triple de Meindl cerró la primera mitad con delantera de 43 puntos, 60-17, para los brasileños.

Puerto Rico solo atinó seis canastos de campo en los primeros 20 minutos, a la vez que Brasil acumuló 16 asistencias en una muestra de la excelencia en el movimiento del balón.

En el tercer parcial, pocas cosas cambiaron. Aunque hubo una mejoría ofensiva con 25 puntos en el segmento, Brasil continuó con su dominio y finalizó con ventaja de 37 puntos, 79-42.