San Francisco. Draymond Green estará ausente de los Warriors de Golden State por tiempo indefinido, lo que el dirigente Steve Kerr calificó como una “decisión mutua” después que el delantero agrediera a su compañero de equipo Jordan Poole durante un altercado el miércoles.

Green tenía programado reunirse con el equipo para la práctica del sábado. Dijo que espera jugar en primer juego de la temporada de Golden State el 18 de octubre, pero no está seguro de su estado ni de cuánto tiempo estará fuera.

Poole no resultó herido. Tampoco Green, un veterano que forma parte de los cuatro campeonatos de Golden State.

Green no entró en detalles sobre lo que desencadenó el altercado físico, aunque sostuvo que ya estaba lidiando con algo doloroso ese día antes de estallar y que no tiene nada que ver con la situación contractual.

Dijo que le está dando espacio a Poole después de ofrecerle una disculpa el jueves. Green, quien se auto proclamó como “un ser humano con muchos defectos”, dijo que usaría su licencia para trabajar en formas de lidiar mejor con las emociones y quiere permitir que Poole y los Warriors se recuperen del incidente y se concentren en defender el título.

Green indicó que aceptará el desafío de “enderezar el barco”, lo que aseguró no sería un “proceso fácil”.

“Pero también espero seguir mejorando, a mi estado emocional y cómo manejo mis emociones”, dijo. “Creo que una cosa que me falta es cómo dejar salir las emociones”.

Kerr señaló que “no hay una fecha” para el regreso de Green y que se determinará durante discusiones privadas entre todos los involucrados.