Phoenix. El base All-Star Chris Paul hacía gestos de dolor al inicio del último cuarto, jugando prácticamente con un solo hombro. Cameron Payne recién había sido expulsado. Varios jugadores tuvieron que ser separados y los ánimos estaban caldeados.

El coach de Phoenix, Monty Williams, había advertido a sus jóvenes Suns que enfrentarían momentos como éste en los playoffs de la NBA, en especial frente a los campeones defensores Lakers de Los Ángeles.

Se puede decir que pasaron la primera prueba.

Devin Booker anotó 34 puntos, Deandre Ayton sumó 21 unidades y 16 rebotes y los Suns de Phoenix ganaron su primer duelo de postemporada en 11 años al superar el domingo 99-90 a los Lakers. Para Booker, la participación en postemporada que había esperado por tanto tiempo cumplió con las expectativas.

“La intensidad es diferente, la lucha física es diferente”, señaló Booker. “Y apenas es un juego”.

Fue el primer duelo de postemporada para varios jugadores de los Suns, incluyendo Booker, Ayton y Mikal Bridges, pero no aparentaron ser novatos frente a LeBron James y los Lakers. Ayudaron a contrarrestar una mala tarde de Paul, quien no lució bien tras sufrir una lesión de hombro derecho en el segundo cuarto.

Los Suns tenían ventaja 86-70 al inicio del cuarto periodo, pero rápidamente los Lakers recortaron la diferencia a 86-77 a 9:02 minutos del final.

En ese punto las cosas se agitaron un poco. Alex Caruso de los Lakers y Cameron Payne de los Suns se enfrascaron en un altercado cerca de la banda después que Payne derribó a Caruso. Montrezl Harrell, de Los Ángeles, entró en la gresca y ambos equipos tuvieron que ser separados. Caruso y Harrell recibieron una falta técnica cada uno, mientras que Payne fue expulsado con dos faltas técnicas.

“Es algo de lo que hemos estado hablando como equipo y como personal”, indicó Williams. “Va a haber un momento en el partido en que uno tendrá que controlar sus emociones”.

Y los Suns hicieron justo eso. Booker siguió encestando y Ayton dominó los tableros, terminando con ocho rebotes ofensivos y acertando 10 de 11 tiros de campo, evitando que los Lakers pudieran acercarse en los minutos finales.

James terminó con 18 tantos, 10 asistencias y siete rebotes. Anthony Davis encestó apenas cinco de 16 tiros de campo para 13 unidades. Los Lakers anotaron siete de 26 (27%) intentos de triples.

“Fallé una cantidad enorme de tiros. Como equipo fallamos muchos tiros”, lamentó Davis. “No hay manera de que podamos ganar un juego, y menos una serie, con la manera en que yo jugué. Esto fue culpa mía”.

El segundo encuentro de la serie será el martes en Phoenix.

Los Lakers necesitaron vencer el miércoles a Golden State en un mini-torneo tan solo para conseguir la séptima posición de la Conferencia Oeste en la postemporada. Aún así, llegaron al partido con una ligera ventaja en las apuestas sobre Phoenix, el segundo en la siembra, de acuerdo con FanDuel.