En unas impactantes declaraciones llenas de angustia, dolor y coraje, el dirigente de los Warriors de Golden State, Steve Kerr, dijo el martes “estar harto” de las matanzas masivas en Estados Unidos y acusó a 50 senadores de “mantenernos como rehenes” para “mantenerse en el poder pese a lo que piensan los estadounidenses”.

En una rueda de prensa previa al cuarto partido de la serie final de la Conferencia del Oeste de la NBA, la cual sus Warriors dominaban 3-0 sobre los Mavericks de Dallas, Kerr abrió cortantemente anunciando que no hablaría nada sobre baloncesto.

“Nada ha pasado con nuestro equipo en las pasadas seis horas. Así que cualquier pregunta de baloncesto no importa”, inició.

“Catorce niños fueron asesinados a 400 millas de aquí… y una maestra… y en los pasados 10 días hemos tenido personas negras de la tercera edad asesinadas en un supermercado en Buffalo… hemos tenido a personas asiáticas que iban a la iglesia en el sur de California y ahora tenemos niños asesinados en una escuela”, manifestó un Kerr desencajado y tratando de contener sus frustraciones.

“¿Cuándo vamos a hacer algo?”, gritó el dirigente, resistiendo las lágrimas y el coraje y dando golpes sobre la mesa, ante el total silencio de los presentes.

“Estoy cansado de venir aquí a ofrecer condolencias a las familias devastadas. Me disculpan, pero estoy cansados de los momentos de silencio. ¡Suficiente!”, Kerr volvió a levantar la voz.

El dirigente pasó a denunciar que el proyecto HR8, que establece nuevos requerimientos de verificación de perfil de personas en transferencias de armas de fuego. La Cámara de Representantes aprobó la legislación presentada en 2019, pero el Senado no lo ha bajado a votación.

“Hay 50 senadores que ahora mismo rehúsan a votar en HR8 sobre una verificación del perfil de las personas . Ha estado tirado allí (el proyecto) por dos años. Y hay una razón por la que no quieren votar sobre el proyecto: para mantenerse en el poder”, denunció Kerr.

“Así que les preguntó a ustedes, Mitch McConnell y todos los senadores que se rehúsan a hacer algo sobre la violencia en las escuelas y en supermercados: ¿van a poner su propio deseo de permanecer en el poder por delante de las vidas de los niños? ¿De los adultos mayores? ¿De la gente que va a la iglesia? Porque eso es lo que parece. Es es lo que hacemos todas las semanas”, continuó.

“¡Estoy harto! ¡Ya fue suficiente!”, vociferó.

“Vamos a jugar esta noche, pero quiero que cada persona aquí, y cada persona escuchando esto que piense sobre su hijo o su nieto. O su madre, padre, hermano, hermana. ¿Cómo se sentirían si esto les hubiese pasado a ustedes hoy?”, preguntó.

“No podemos dejarnos adormecer por esto. No podemos leer sobre lo que paso y decir “bueno…un momento de silencio. Go Warriors. O, Vamos Mavericks. Porque eso es lo que vamos a hacer. Y vamos a jugar un juego de baloncesto”.

“Mientras, 50 senadores en Washington nos mantendrán de rehenes. Saben ustedes que 90% de los estadounidenses, independientemente de colores de partidos, quieren el ‘universal background check’? Estamos siendo mantenidos como rehenes por 50 senadores que ni siquiera quieren votar sobre el proyecto a pesar de lo que nosotros queremos. ¡Y no quieren votar porque quieren mantener su poder!”, volvió a levantar la voz.

“¡Es patético! ¡Ya tuve suficiente!”, gritó antes de dar un golpe sobre la mesa y abandonar la sala de prensa.