Justo cuando más lo necesita su equipo, el puertorriqueño José Juan Barea ha retomado esa figura de chispa y catalizador que ya le dio un campeonato a los Mavericks de Dallas.

Barea, con promedio de 22 puntos en los últimos dos juegos, ha mantenido a Dallas aferrándose a la posibilidad de clasificar a la postemporada. Ha sido el mejor anotador en las dos victorias consecutivas de los Mavs, con 26 puntos el miércoles contra los Knicks de Nueva York (91-89) y 18 tantos el lunes en visita a los Nuggets de Denver (97-88). 

“Me siento en gran ritmo”, dijo Barea tras el triunfo de anoche, según fue citado por ESPN.

El mayagüezano, además de sus 26 puntos, también sumó siete asistencias.

“Mis piernas se sienten bien. Me siento rápido, que puedo llegar a donde quiera en cualquier momento con las cortinas. Esta noche (ayer), cuando estábamos abajo, sabía que iba ser bien agresivo. Me sentía confiado que las cosas iban a cambiar”, aseguró Barea, de 31 años.

La reciente actuación de Barea también comienza a llamar la atención de los fanáticos y la prensa en Dallas. El boricua fue esa chispa en el título de Dallas en el 2011, y ahora, con 31 años, Barea está jugando de una manera parecida.

“Barea ha estado, sencillamente, brillante saliendo del banco durante la modesta racha victoriosa de los Mavs”, escribió el periodista Tim MacMahon, de ESPN. 

Mientras, el estelar Dirk Nowitzki volvió a rendirse en elogios hacia el puertorriqueño.

“Es un pequeño competidor. Él (Barea) siempre ha estado ahí para nosotros y dándonos una chispa. Es un pequeño muy fuerte”, dijo Nowitzki. 

Barea registra promedios de 10.4 puntos y 4.1 asistencias en la actual temporada. 

Los Mavericks, con récord de 37-38, se encuentran en un triple empate con los Rockets de Houston y el Jazz de Utah por las posiciones siete a la nueve en la Conferencia del Oeste. Los Mavs regresan a la cancha mañana, viernes, cuando reciban a los Pistons de Detroit.