Para los Atléticos de San Germán no hay mañana.

Luego de dos dolorosas derrotas el pasado fin de semana, el Monstruo Anaranjado viaja esta noche a Arecibo para intentar comenzar la difícil remontada de 1-3 que enfrenta contra los dos veces campeones Capitanes.

Tanto el sábado como el domingo, San Germán ganó la primera mitad de ambos encuentros, sin embargo, en la segunda parte, gracias al juego de sus armadores Guillermo Díaz, Andrés Rodríguez, y la puntería de Larry Ayuso, los Capitanes se pudieron recuperar para barrer el segundo back to back de la serie y colocarse a un triunfo de otro pase a la serie final.

“Los últimos dos juegos se nos han escapado. Arecibo es un equipo con mucha experiencia en juegos grandes y nos han dominado en la parte final”, comentó Nelson Colón, dirigente de los Atléticos.

Y para colmo de males, un momento de rabia injustificado de una fanática de San Germán aportó a la desdicha de los Atléticos.

Luego de terminar los 40 minutos reglamentarios, y con el juego empate, una fanática lanzó una pulsera a la cancha que le dio en la cara al árbitro Jorge Vázquez, lo que provocó que se le cantara una falta técnica al equipo local, lo cual Arecibo aprovechó con dos tiros libres de Ayuso y otros dos de Díaz, luego de un rebote ofensivo de Danilo Pinnock.

“Eso cambió el curso del juego, el enfoque se perdió y nos paró el moméntum”, expresó algo incómodo Colón.

Sin embargo, el dirigente entiende que, aparte de ese lamentable suceso, su equipo dejó de producir en la parte final del juego, lo que le costó las opciones de triunfo.

“Paramos la fluidez en ofensiva, la concentración no fue la mejor, y fallamos tiros libres al final, aparte de que Arecibo ejecutó en el clutch”, apuntó Colón, quien espera un despertar del importado Mike Harris, quien apenas promedia 9.5 puntos en la serie con un 30% en tiros de campo.

“No nos vamos a quitar, vamos a ver qué damos. Hay que jugar por el orgullo”.

por identificar la fanática

Por otro lado, el apoderado de San Germán, Edwin Mundo condenó la situación que ocurrió el domingo y dijo que se le radicó una querella a la mujer, aún por identificar.

De acuerdo con Mundo, la mujer, quien tiró la pulsera a la cancha, se mantuvo en la instalación hasta que fue señalada por otros asistentes, pero ésta salió corriendo del lugar antes de que la policía llegara a detenerla.