Carolina. Ni el regreso de Tremont Waters y George Conditt IV a los Gigantes de Carolina fue suficiente para detener el martes a los Osos de Manatí.

Por tercer juego consecutivo, los Osos fueron superiores en todos los aspectos y aplastaron, 103-86, a Carolina para colocarse a una victoria de su primera final y de barrer al campeón defensor del Baloncesto Superior Nacional (BSN).

Dicen que la historia está condenada a repetirse y, durante esta serie, Manatí asumió el papel de los Gigantes cuando destronaron a los Vaqueros de Bayamón en la serie final 2023. Y al igual que los Vaqueros hace un año, Carolina todavía no ha descifrado la forma de contener a su rival.

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“Sí, me pasó por la mente”, admitió el dirigente de los Gigantes, Carlos González, a Primera Hora después del partido, cuando se le mencionó las similitudes de esta serie con la final pasada.

“Se viró la peseta. Es parte dé, pero nada. Hay que buscar la manera de seguir y tener una herramienta adicional y diferente para poder contrarrestar a ellos y poderlos sacar de esa zona en la que están”, abundó.

“Están mágicos”

Lo cierto es que los Osos han provocado que los Gigantes luzcan como un equipo totalmente distinto al que los aficionados que visitan el Coliseo Guillermo Angulo, de Carolina, están acostumbrados a ver jugar.

Aquella fluidez ofensiva y puntería a larga distancia que los destaca ha desaparecido. En tanto, los Osos están promediando 16.3 triples en la semifinal. Y la frustración que arropa a los integrantes del conjunto era palpable durante cada tiempo pedido el martes.

González ha intentado cada truco que tiene debajo de la manga, pero ninguno ha dado resultados contra unos Osos que no han probado la derrota en sus últimos cinco partidos.

“La verdad es que están mágicos. No fallan. Ellos tienen un poderío ofensivo fuerte. Tienen unos guards creadores como Jhivvan Jackson, Norris Cole e Ethan Thompson. Isaac Sosa, pues anota y es difícil quitarles cosas. Están en un buen ritmo. He tratado de hacer varias cosas: zona, ‘switchear’, presear y honestamente responden todo”, relató el técnico de Carolina.

No es tarea fácil contener la ofensiva de los Osos. Después de todo, son el segundo equipo que más puntos anota por juego con una media de 96 puntos y el que eliminó a los Capitanes de Arecibo, líderes de la Sección A con el mejor récord en la liga.

Uno de los aspectos que hace que sea tan complicado derrotarlos es que cuentan con una segunda unidad que está compuesta por algunos de los mejores canasteros nativos como Jordan Howard, Ethan Thompson y Jhivvan Jackson.

“El banco de Manatí no es uno profundo, pero es de gran calidad con Jordan Howard, Jhivvan Jackson e Ethan Thompson. Son tres tipos que en cualquier equipo son regulares y que tienen una capacidad para anotar en esta liga de 12 a 15 puntos todos los días”, comentó González.

Y tras un doloroso revés como este, no es sorpresa que los ánimos en el camerino de los Gigantes no eran los mejores después del encuentro. Abajo en la serie 0-3, los jugadores de Carolina estaban visiblemente afectados.

De hecho, Primera Hora intentó obtener una reacción de Waters y Conditt IV, pero ambos se negaron a ofrecer declaraciones respetuosamente. Las dos jóvenes estrellas vieron acción a menos 24 horas de arribar a la isla luego de representar a Puerto Rico en los Juegos Olímpicos de París 2024. Waters anotó 17 puntos y repartió cinco asistencias, mientras que Conditt IV agregó 13 unidades y atrapó seis rebotes.

Tremont Waters, de los Gigantes de Carolina, controla el balón ante Norris Cole, de los Osos de Manatí.
Tremont Waters, de los Gigantes de Carolina, controla el balón ante Norris Cole, de los Osos de Manatí. (BSN)

González indicó que ninguno de los dos llegaron cansados de la capital francesa y solo necesitan caer en el ritmo del quinteto.

“Acaba de llegar Tremont (Waters) y (George) Conditt IV y es un proceso nuevo de adaptación. Con esta situación que estamos 0-3 y nos dieron hoy aquí en la cara por 20, es normal que salga esa frustración. Es parte dé. Vamos a seguir peleando porque esto no se ha acabado... Llevamos dos o tres semanas que no nos vemos y no es así de fácil llegar y meterlos de cantazo”, indicó el entrenador.

Sin embargo, esto es una situación con la que Manatí también tiene que lidiar porque en el tercer juego se reincorporaron a sus filas los olímpicos Howard y Chris Ortiz, capitán del Equipo Nacional.

Por otro lado, uno que desapareció en el tercer desafío de la serie fue el refuerzo Brandon Goodwin, quien ha sido el líder ofensivo de los Gigantes desde que Waters se reportó a la Selección Nacional a mediados de junio. Previo al tercer juego, Goodwin promediaba en las semifinales 23 puntos, pero el martes aportó solo dos y lanzó tres veces. Y González admitió que compartir la cancha con Waters lo pudo haber afectado.

“Pudo haber sido… Es humano. Yo pensaba que no”, dijo González entre carcajadas.

“Me corresponde a mí buscar la manera de que los dos (Goodwin y Waters) sean positivos en el grupo. Esa es mi responsabilidad”, agregó.

El milagro no será Mike Scott

González, quien está invicto en séptimos juegos con marca de 6-0, por primera vez en su carrera en el BSN está perdiendo una serie 0-3. Para empatarla, los Gigantes necesitarán casi un milagro y no será el refuerzo Mike Scott, Jugador Más Valioso de la final 2023.

Scott está en Puerto Rico desde principios de junio, pero no ha vestido el uniforme del “Calentón” porque se está recuperando de una artroscopia de rodilla.

Por esta razón, Scott está descartado para el cuarto partido de la serie semifinal este jueves en el Coliseo Juan Aubín Cruz Abreu “Bincito”, de Manatí.