Lento, pero seguro.

Así transcurrió el proceso de entrada al Coliseo Rubén Rodríguez para el partido inaugural entre los Vaqueros de Bayamón y los Cangrejeros de Santurce del Baloncesto Superior Nacional (BSN) la noche del sábado.

Personas comenzaron a llegar al histórico recinto deportivo hasta cuatro horas antes de que los portones fueran abiertos oficialmente para iniciar las debidas verificaciones según los protocolos delineados por los directivos del BSN y, a su vez, aprobados por el Departamento de Salud. Cada persona debía presentar su respectiva tarjeta que certifica recibió las dosis de las vacunas contra el virus COVID-19.

Cuando restaban 15 minutos para comenzar el partido, todavía quedaba un mar de personas en fila esperando por llegar a la entrada.

“Es un proceso un poco lento porque tenemos que verificar la tarjeta de la vacuna con la identificación de cada persona. Eso aguanta un poco las filas”, explicó una de las supervisoras de C&C Security, empresa contratada por la gerencia de los Vaqueros para velar por el proceso.

Sostuvo que personas proveyeron una imagen digital de la tarjeta y no se les permitió entrar. Asimismo, tampoco se les dio acceso al coliseo a los menores de 12 años que no estén vacunados.

“Independientemente que traigan una prueba negativa, no entrar para así garantizar que sea un evento 100% de personas vacunadas. Esas son las directrices. Es lamentable, pero hemos tenido que negar la entrada a personas que, desafortunadamente, se han puesto bravos”, indicó la supervisora de seguridad que prefirió no ser identificada.