“Dedicación a los pacientes”.

Así define Arlene Vega su profesión como farmacéutica. Con 21 años laborando en la cadena de farmacias Walgreens, reconoce que el mayor reto de su carrera lo está viviendo en estos momentos ante la pandemia por el COVID-19.

Y es que, su función –así mismo la de sus compañeros­– va mucho más allá de la dispensación de medicamentos. Como profesionales de la salud, son los más accesibles a la población; promueven un bienestar integral a través de la educación, el seguimiento de los tratamientos y la prevención de enfermedades con la administración de vacunas.

En ese rol de inoculación contra el novel coronavirus, Vega describe que la retroalimentación de los pacientes ha sido muy positiva. “Nos dan las gracias, nos dicen superhéroes y aplauden”. De esta manera, muchos han homenajeado la labor de estos profesionales, que este año celebran la Semana del farmacéutico del 11 al 17 de abril.

El compromiso ha estado siempre

Más allá de la vacunación, los farmacéuticos han sido un recurso indispensable desde el inicio de la pandemia. “Había mucha incertidumbre, tanto en los pacientes como en el equipo de trabajo, pero hemos servido como una fuente de información confiable”, destacó Luis Velázquez, farmacéutico en Walgreens en Vega Baja. Asimismo, a través de pruebas de diagnóstico, han ayudado con la identificación de casos positivos y así lograr “bajar la curva de contagios, que es lo que todos queremos”, mencionó Vega, quien labora en Walgreens en Carolina.

Es así como en este proceso se ha visto el compromiso continuo del equipo de farmacia de la empresa de brindar salud y seguridad a las comunidades. “Nos estamos diversificando, no es solamente verificar el medicamento, es el bienestar del paciente en su totalidad. Nuestro rol también es orientarlos y darles tranquilidad”, señaló Gloria Rivera, quien trabaja en Walgreens en Cayey y ha laborado por 17 años en la empresa.

La cadena de farmacias inició en Puerto Rico en 1960 y actualmente cuenta con 104 establecimientos y cerca de 350 farmacéuticos, quienes forman la parte esencial del negocio. Continuamente, la empresa ha enfatizado la importancia de alcanzar la excelencia en el servicio.

“Estar accesibles a la comunidad hace que el rol del farmacéutico sea uno esencial, especialmente en estos tiempos donde estamos distanciados socialmente y hay una barrera en la disponibilidad de los médicos”, subrayó Velázquez. Igualmente, Rivera expresó que son un “intermediario entre el médico y el paciente”.

Walgreens se ha caracterizado por llevar campañas de vacunación masivas contra enfermedades como la influenza. El éxito recae, principalmente, en los hombros de los farmacéuticos.

El paciente va de la mano del farmacéutico

Walgreens cuenta con varias herramientas que promueven el cuidado y aseguran que todos los pacientes tengan sus medicamentos a tiempo y la adherencia a ellos sea cumplida.

“Hay un sistema que le permite al farmacéutico llamar a los pacientes para recordarles que sus medicamentos están listos o necesitan repetición. En el caso de la pandemia, se han hecho varios suplidos de emergencia para asegurarnos de que cada persona tenga su medicamento en lo que logra asistir a su médico para ser evaluado. La aplicación de Walgreens ha permitido que los pacientes accedan a citas para vacunaciones y pruebas de COVID-19. De esta forma, no solo es un centro para prevenir la enfermedad, también se monitorea”, explicó Velázquez.

El farmacéutico contó que mientras participaba en el proceso de inmunización en un centro de cuidado prolongado, una paciente comenzó a llorar de alegría. “Es porque esto representa un cambio en el curso de la pandemia”, contó.

Por su lado, Rivera expresó que “aparte del reto que ha representado la carga emocional, ha sido una satisfacción”, añadiendo que en su farmacia vacunan más de 90 pacientes diariamente.

Su responsabilidad continúa

Los farmacéuticos finalizaron expresando cuál es su compromiso hacia el futuro como profesionales de la salud.

“Mi compromiso es tener una amplia disponibilidad para Puerto Rico, siendo un recurso indispensable para la administración de vacunas de COVID-19 y educar al público sobre cómo contrarrestar esta enfermedad. Una vez culmine la pandemia, poder continuar con medidas de prevención”, afirmó Velázquez.

A su vez, Rivera dijo sentir la responsabilidad de seguir participando en nuevos programas clínicos y buscar el bienestar del paciente en su totalidad. “Hay pacientes que vienen con miedo a las vacunas y nuestro rol es orientarlos y decirles que todo va a estar bien, siempre que sigan las recomendaciones”. Añadió estar agradecida con la empresa porque le ha permitido desarrollarse durante esta etapa.

Vega, por su parte, aseguró “continuar brindado cuidado farmacéutico a los pacientes por medio de las consultas; estar pendiente de que las terapias que reciben no tengan ningún efecto secundario o contraindicaciones por otros medicamentos. Sobre todo, evitar que las condiciones se compliquen y prevenirlas a través de la vacunación”.

Walgreens celebra y destaca la labor de todos sus profesionales de la salud, en especial, en esta semana del farmacéutico.