El diario vivir de las mujeres trabajadoras puede ser abrumador. Levantarse temprano para llevar a los chicos a la escuela, hacer presentaciones en el trabajo y salir corriendo a reuniones, sacar tiempo para ir al gimnasio, dedicarle un rato a la cocina y conseguir ese momento para compartir en pareja...la lista es larga. Si a eso le añadimos el tiempo que dedicamos a mimarnos y estilizar nuestro cabello, parecería imposible que las horas del día sean suficientes.

Reconociendo esta realidad, intervinimos un espacio de trabajo para crear una experiencia de lavado sorpresa con la nueva línea reformulada de Pantene y potenciar el día de las chicas de la oficina.