En Estados Unidos, se cree que el virus del papiloma humano (VPH) causa el 91 % de los casos de cáncer de cuello uterino, según las estadísticas más recientes de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés). Mientras que el cáncer orofaríngeo es el más común entre los hombres y cerca del 72 % de estos casos son provocados por el VPH.

De acuerdo con el hematólogo oncólogo Edgardo Santiago, los hombres y mujeres entre las edades de 25 a 40 años podrían estar expuestos a estos tipos de cáncer causados por el virus.

“Antes, la incidencia de cáncer de orofaringe en los hombres era después de los 60 años y en muchos casos se debía al consumo de alcohol o tabaco, pero actualmente la prevalencia es en hombres jóvenes que se han infectado con el VPH”, sostuvo el especialista.

El VPH es la infección de transmisión sexual más común a nivel mundial. Este virus, del que se conocen alrededor de 200 genotipos, se puede transmitir de una persona a otra mediante contacto sexual. Según los CDC, el VPH es tan común que casi todos los hombres y mujeres sexualmente activos lo contraen en algún momento de su vida.

En la mayoría de los casos, el virus desaparece por sí solo. Sin embargo, en algunas personas, la infección permanece en el cuerpo y puede provocar ciertos tipos de cáncer. “Si el paciente se infecta con los genotipos de alto riesgo, puede llegar a tener cáncer, entre estos: cáncer de cérvix, vagina, orofaringe, ano y pene. Es una infección silente, que no presenta ningún síntoma, pero a largo plazo pudiera causar cáncer en estas áreas”, mencionó Santiago.

“En una persona con el sistema inmunológico competente, el diagnóstico de algún tipo de cáncer podría darse luego de 10 o 15 años de la infección, mientras que, en pacientes inmunocomprometidos, el tiempo se reduce de cinco a siete años”, agregó.

Protégete por medio de la vacunación

Afortunadamente, por medio de la vacuna contra el VPH, se pueden prevenir hasta seis tipos de cáncer asociados a este virus.

Según Santiago, la indicación de la vacuna está dirigida a personas entre nueve y 45 años. La edad recomendada para recibir la vacuna, según los CDC, es a los 11 años.

Por su parte, una persona puede recibir la vacuna contra el VPH aun cuando se haya contagiado con una cepa del virus. “Si el paciente tiene activa alguna de esas cepas, la vacuna no la va a eliminar, sino que va a ayudar a prevenir la infección con alguna otra”, explicó el médico, quien mencionó que esta vacuna protege contra nueve cepas del VPH.

Los menores de 15 años reciben dos dosis con una separación de seis meses entre cada una. A partir de esa edad hasta los 45 años, se recomiendan tres dosis con un itinerario de segunda dosis a los dos meses y una tercera dosis a los seis meses de la primera.

El especialista subrayó que, si no se completan las dosis, la inmunidad del cuerpo contra el virus será menor, por lo que aumentará el riesgo de contagio.

“Este tipo de vacuna no es viva. Las que sí lo son pudiesen aumentar el riesgo de que las personas adquieran la condición si el sistema inmunológico está débil. A través de esta vacuna se introduce una parte del virus para que el cuerpo pueda identificarlo y desarrolle anticuerpos. De esta manera, el cuerpo evita que ocurra una infección”, dijo Santiago.

“Son pocos los tumores o cánceres que se pueden prevenir. Por medio de la vacunación contra el VPH, se puede evitar el riesgo de cáncer en muchos órganos. La vacunación es una herramienta para bajar la incidencia de cáncer que cada día está en aumento en los adultos jóvenes”, continuó.

Para más información visite a un profesional de la salud para que lo oriente y pueda realizar el referido médico para vacunarse contra el VPH.