Desde hace un tiempo hay cambios en tu intimidad. Sientes incomodidad, una sensación de quemazón y cuando llega ese momento tan deseado por ti y tu pareja, no entiendes por qué no “respondes” como antes…tu vagina no se lubrica.

Posiblemente has notado unos síntomas que se presentan hace poco, pero no te atreves a discutirlos con tu médico. Pero, ¿por qué?

No tienes razón para temer a los cambios, pues solo son parte de la vida y a nosotras, las mujeres, nos espera uno muy importante: la menopausia.

La ausencia de la menstruación es mucho más que no expulsar sangre mensualmente. Significa, además, una variación en la producción de hormonas que nos puede causar los siguientes síntomas:

1. Resequedad, quemazón y/o picor vaginal

2. Sexo doloroso

3. Disminución del deseo sexual

4. Pérdida de la densidad ósea

5. Piel reseca

6. Sofocones

7. Insomnio

8. Cambios de humor

9. Cambios vasculares

¿No crees que mereces disfrutar de la intimidad a plenitud en esta etapa de tu vida? ¡Por supuesto! Entonces, ¿cómo hablas con tu médico del tema?

Algunas recomendaciones que te ayudarán a apalabrar esa molestia:

1. Si sospechas que estás atravesando la menopausia, pregúntale a tu ginecólogo por los síntomas. Él te los explicará y entrarán más en confianza para que le indiques específicamente lo que te ocurre.

2. Confía en tu doctor, háblale despacio y con palabras sencillas. No le des vueltas al asunto y ve al grano.

3. No le ocultes información, sé sincera con él y contigo. Al final, será para tu beneficio.

El veterano ginecólogo Henry Rodríguez Ginorio explica que, en la actualidad, las féminas que pertenecen a la generación Baby Boomers pueden cohibirse un poco al hablar de su sexualidad.

“Hay ciertos aspectos culturales con los que fueron criadas, como por ejemplo, que hay que soportar el dolor, que el parto tenía que doler, la menstruación era dolorosa y la menopausia también. Por eso les resulta difícil exteriorizarlo”, indica el especialista, quien le da tranquilidad a sus pacientes presentándoles diversas alternativas de alivio ante el llamado “cambio de vida”.

Entre las opciones que te ayudarán a rescatar tu intimidad están la crema vaginal de estrógenos conjugados y las terapias hormonales, que el médico discutirá contigo.

Ya verás cómo al poco tiempo tus encuentros sexuales no dolerán y tu pareja —quien posiblemente ya se estaba preocupando al notar que no disfrutabas de ese momento— también lo agradecerá…¡y de una excelente manera!

Recuerda que en esta etapa de nuestras vidas, hemos logrado la mayoría de nuestras metas, por lo que buscamos hacernos felices y sentirnos satisfechas con nosotras mismas. La sexualidad y nuestra salud vaginal es parte de ello.